• Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
logo-final
  • Inicio
  • Sobre mí
  • Servicios
  • Regalo
  • BLOG
    • ALIMENTACIÓN Y EJERCICIO
    • DESARROLLO PERSONAL
    • MIS VIAJES
  • Equipo
  • Contacto

minimalismo existencial

MINIMALISMO CON LUCÍA TEROL: «ORDENAR FUERA PARA ORDENAR DENTRO»

22 agosto, 2019 por taniacarrasco 2 comentarios

El Minimalismo se ha convertido en una de mis filosofías de vida desde hace ya algunos años.

Por ello, una de mis principales referentes en el asunto es Lucía Terol de Sencillez Plena.

Fue uno de los primeros blogs sobre Minimalismo que empecé a seguir y conocer a Lucía, a través de la entrevista que te ofrezco hoy, me reafirmó la idea que tenía de ella.

Mujer amorosa, clara, sencilla e inteligente.

Lo que yo llamo una mujer muy poderosa.

Quieres saber cuáles fueron los puntos principales que tratamos en la entrevista, antes de que pases a verla?

Te los cuento:

EL GRAN OBJETIVO DEL MINIMALISMO

Como el título de este artículo indica, el Minimalismo parte de una idea importante: «para ordenar dentro es bueno empezar por ordenar fuera».

O, lo que es lo mismo, «tu mundo exterior refleja lo que ocurre en tu mundo interior».

Interesante, verdad?

Lucía te lo va a contar mejor que yo 😉

SUS GRANDES DESCUBRIMIENTOS RELACIONADOS CON EL MINIMALISMO

Cada persona que se acerca a esta filosofía de vida utiliza el Minimalismo de una manera.

Esto es sano, hacer tuyo lo que podría ser una filosofía estanca y rígida.

Para nada ocurre esto con el Minimalismo.

Así que Lucía te va a contar cuáles fueron sus grandes descubrimientos personales al respecto.

CÓMO SE DIO CUENTA DE QUE ESTABA LOCA

Además de amorosa, clara, sencilla e inteligente, esta mujer es divertidísima.

Llegó incluso a pensar que podía estar loca…

Ahí lo dejo, descubrirás más en la entrevista al final del artículo.

DESMONTANDO CREENCIAS

Reconozco que a lo largo de mi vida he sido una auténtica maniática del orden y la limpieza.

Creo que a Lucía no le ocurría esto en su pasado.

De hecho, tuvo que desmontar creencias sobre sí misma como la de pensar que el desorden era algo bohemio.

Conozco alguna que otra persona desordenada, incluso he convivido con gente de este tipo.

Si tú eres este tipo de persona, déjame que te diga que no, el desorden no es bohemio. El desorden es una faena, sobre todo si compartes tu vida con alguien a quien le gusta tenerlo todo colocado.

De hecho, también hablamos sobre cómo ser minimalista cuando vives con alguien que tiene síndrome de Diógenes.

LA CONCILIACIÓN LABORAL ES MINIMALISTA

Además de todo lo que te acabo de contar, también hablamos de conciliación.

Por qué?

Porque el Minimalismo es una cuestión de prioridades, y para conciliar tu vida personal con la profesional, sobre todo cuando eres mamá, tienen que estar muy claras dichas prioridades.

Lucía es una profesional como la copa de un pino, con un negocio consolidado en constante crecimiento, que además es mamá y concilia divinamente.

Si este tema te interesa te va a encantar lo que te cuenta.

Y si te interesa demasiado, quizá aquí también encuentres la solución a tus problemas de conciliación.

NO ES LO QUE HACES SINO DESDE DÓNDE LO HACES

Una de las joyitas de la entrevista que te llevará a plantearte:

  • si estás haciendo las cosas desde el amor o desde el miedo,
  • desde la esencia o desde el ego,
  • desde el qué dirán o desde lo que te dice tu corazón.

Porque es importante reducir, pero más importante es el «para qué» haces lo que haces.

Es importante dejar de querer ser «super algo» porque puedes acabar perdiéndote a ti misma.

Y también es importante que dejes de identificarte con las cosas materiales, porque eres mucho más que lo tienes. Pero mucho mucho mucho más.

De todo esto y mucho más, hablaré con Lucía en la entrevista que encuentras a continuación.

Si te interesan sus servicios, puedes ir aquí directamente.

Pero no te pierdas la entrevista porque merece la pena. «Palabrita del niño Jesús» 😉

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: minimalismo existencial

INTRODUCCIÓN AL MINIMALISMO PARA MUJERES QUE QUIEREN SER MÁS LIBRES

26 mayo, 2019 por taniacarrasco 4 comentarios

Cuando decides poner en marcha un nuevo estilo de vida, empezar de golpe es poco recomendable. Por eso he creído necesario escribir este artículo sobre introducción al Minimalismo para mujeres que quieren ser más libres.

De este modo, si el Minimalismo estaba rondando por tu cabeza, empezar con una introducción poco a poco te va a ayudar a encontrar tu propia manera de llevarlo a cabo.

Si llevas un tiempo siguiendo a RevolucionaT, quizá te ha podido sorprender que hable de Minimalismo incluso cuando estoy tratando temas tan serios como los traumas infantiles.

Pero el Minimalismo no ha entrado en mi vida de repente, es parte de mi proceso, de ese proceso que me ha hecho sentirme cada vez más libre y del que llevo hablándote varios años, aunque con diferentes enfoques.

Con el Minimalismo, precisamente, voy a tratar de reducir estos enfoques para que tengas bien claro hacia dónde te tienes que dirigir si lo que deseas es ser una mujer más libre. Con lo que quiera que signifique para ti la libertad.

Vamos con ello?

 

 

 

INTRODUCCIÓN AL MINIMALISMO COMO CONCEPTO

El Minimalismo, en su origen, nació como una corriente artística en Nueva York, allá por los años 60.

Hay quienes atribuyen este nacimiento a la arquitectura, a la fotografía, a la pintura e incluso a la música.

Sea como fuere, este un dato simbólico que solo te sirve para situarte, nada más.

Pero sí quiero que te quedes con los conceptos más importantes que tenía en cuenta el Minimalismo en su nacimiento, relacionados con lo que te quiero contar en este artículo.

Esos conceptos, entre otros, eran:

  • Economía de lenguaje y medios.
  • Austeridad con ausencia de ornamentos.
  • Orden.
  • Reducción y síntesis.
  • Sencillez.
  • Desmaterialización.

 

CÓMO RELACIONAR LOS CONCEPTOS MINIMALISTAS CON LA IMAGEN DE LA MUJER

Ahora me vas a permitir que le ponga cierta nota de humor a los conceptos antes mencionados, si los comparamos con la imagen que se tiene de la mujer hoy en día:

 

1.Economía de lenguaje y medios…

Empezamos bien! Economía de lenguaje y mujer…Dos conceptos que no suelen ir unidos, ni aunque seas andaluza (por eso de que en Andalucía se hace referencia a la economía del lenguaje para defender elo de comerse letras en todas las palabras).

– Que me perdonen mis queridas andaluzas, a las que adoro –

Por no mencionar la tendencia a pensar que las mujeres somos demasiado habladoras.

Desde luego, en lo que a economía del lenguaje se refiere, no somos las mejores.

 

2. Austeridad con ausencia de ornamentos…

Esta parte también es graciosa puesto que las mujeres solemos llevar ornamentos de más. Y esto no es una opinión sino prácticamente una verdad absoluta, casi un hecho que se puede comprobar científicamente.

Yo misma, antes de hacer mi propia introducción al Minimalismo, tenía tendencia a «decorarme» de la siguiente manera:

  • Ropa conjuntada
  • Calzado acorde con el conjunto
  • Bolso a juego
  • Pañuelo al cuello a modo decorativo
  • Pendientes
  • Anillos
  • Pulseras
  • Maquillaje
  • Pintalabios
  • Raya de ojos
  • Rímmel
  • Colorete

Así que «mi cuadro» no podía considerarse ausente de ornamentos ni mucho menos.

No te rías que a ti te pasa lo mismo! 😉

 

3. Orden…

Bueno, en este punto sí que soy minimalista desde que nací, pero si vas a casa de mi amiga Elena verás que mi gusto por el orden no es algo intrínseco al género femenino, ni a ningún género.

 

4. Reducción y síntesis…

Y aquí voy a ir un poco más allá para que analicemos si en alguna faceta de tu vida estás utilizando la reducción o la síntesis para simplificar.

Sigue pensando…

Sigue sigue…

No hemos encontrado nada, verdad?

Pasamos al siguiente punto entonces.

 

5. Sencillez…

No sé lo que tú entenderás por sencillez pero, y siento decirlo, las mujeres somos algo «complicadas» de más.

Le buscamos 3 pies al gato y siempre encontramos la manera de dar mil vueltas a casi todos los asuntos.

Sencillas, sencillas, oye pues no somos. Pero es una cualidad que se puede cultivar y que te va a beneficiar. Ya lo verás.

Déjame que siga contándote…

 

6. Desmaterialización…

Corrígeme si me equivoco pero te gusta tener mucho de todo, así que este punto también habría que revisarlo si quieres hacer una introducción al Minimalismo de verdad.

 

Después de esta análisis, aún te preguntarás por qué no consigues sentirte libre y con calma mental.

Y la pregunta se responde por sí sola: hay demasiadas cosas que sobran en tu vida.

  • Y lo que sobra, pesa.
  • Y lo que pesa te hace el camino más lento.
  • Y si vas lenta, llegas tarde.
  • Y si llegas tarde te sientes culpable.
  • Y si te sientes culpable te compras otro bolso para aliviarte…

Y vuelta a empezar.

De hecho, se relaciona el Minimalismo como la consecuencia natural de intentar recuperar el norte, en un mundo atrapado por el consumismo.

Pero no te quedes solo ahí, en Minimalismo vs Consumismo.

Llévate ese enfrentamiento simbólico a cualquier área de tu vida y entenderás lo que significa Minimalismo existencial.

 

INTRODUCCIÓN AL MINIMALISMO COMO ESTILO DE VIDA

Con el nacimiento de esta corriente artística, sus principios se empezaron a extender a todas las áreas de la vida.

La primera vez que yo escuché hablar de minimalismo a alguien de mi entorno, fue cuando mi chico me comentó que se quería comprar unas zapatillas para hacer deporte donde se podían meter los 5 dedos del pie por separado.

Ahora yo también tengo una de esas zapatillas y son una maravilla.

Aunque la gente me mira muy raro cuando me ven con ellas puestas, incluso me hacen preguntas al respecto sin conocerme de nada. Una cosa muy curiosa…

Volviendo a la introducción al Minimalismo, en un principio, parecía seguir siendo una filosofía relacionada con lo material:

  • Reducir el número de objetos.
  • Vestir ropa más sencilla y coherente con el cuerpo humano.
  • Comprar solo lo necesario.

Una filosofía que, sobre todo y para no perder la costumbre, estaban poniendo de moda los hombres desde diferentes partes del mundo.

Dile tú a una mujer que vaya a una boda con unos zapatos planos donde se pueden meter los 5 dedos.

Hombre por favor!

Pero lo que, en principio, tenía que ver solo con lo material, fue tomando forma y apareció el minimalismo existencial.

 

QUÉ ES EL MINIMALISMO EXISTENCIAL EXACTAMENTE

Lamento decirte que no podremos definirlo con total exactitud, pero nos aproximaremos al máximo:

Según el blog Homo Mínimus, el minimalismo existencial puede definirse como:

«Filosofía de vida que propugna centrarse en lo importante y eliminar o descartar lo innecesario para ser feliz y alcanzar la realización personal».

Y esto puede llevarse a cualquier área de tu vida.

Pero si quieres hacer tu propia introducción al Minimalismo, tendrás que hacerte ciertas preguntas para detectar qué es lo importante para ti y de qué manera puedes descartar lo que no lo es, para alcanzar tu realización personal.

 

 

PREGUNTAS NECESARIAS PARA HACER TU PROPIA INTRODUCCIÓN AL MINIMALISMO

Tendrás que responder a estas preguntas honestamente.

Para ello, antes de empezar, sería genial que pudieses estar en un lugar tranquilo y tomar unas cuantas respiraciones profundas para relajarte un poco.

Si consigues un poco más de tranquilidad de la habitual, las respuestas serán más coherentes con lo que quieres en realidad y no con las prisas del momento.

Vamos con las preguntas, pero ya sabes, primero relájate un poco.

Coge papel y boli, y que sea un ejercicio que hagas de verdad, no me vengas con «luego lo hago» 😉

 

Pregunta 1: Qué 5 cosas, o áreas, son las más importantes de tu vida?

Hay que tener cuidado con esta pregunta porque es muy fácil engañarse aquí. Te pongo un ejemplo muy tonto.

Puedes poner que las 5 cosas más importantes para mí son: mi familia, mis amig@s, mi pareja, mi salud y mi coche.

Pero, en realidad, empleas más tiempo en ir de compras para estar a la moda o trabajar, que en todo lo demás.

En ese caso, aunque a nivel consciente hayas dicho que lo más importante es tu familia, amig@s, bla bla bla…es evidente que lo más importante para ti es dar buena imagen exterior y tener contenta a la empresa.

Así que sé honesta al responder las preguntas porque nadie te está escuchando.

Imagínate que has puesto:

  • Tu familia
  • Tu pareja
  • Tu casa o tu coche
  • Ir al gimnasio todos los días
  • Viajar

 

Pregunta 2: Hay algo en alguna de esas 5 áreas que esté sobrando para que puedas disfrutar de ella plenamente?

Cuando me refiero a qué es lo que sobra, no quiero llegar a ningún punto concreto. Simplemente reflexiona si hay algo relacionado con esas 5 áreas que puede estar sobrando e impidiéndote disfrutar.

Por ejemplo: Si te gusta ir al gimnasio todos los días pero no puedes, quizá sobran horas de trabajo.

O si te gustaría tener más tiempo para disfrutar de tu familia, quizá estén sobrando otros compromisos que te lo impiden.

O si te gusta disfrutar de tu casa pero siempre está desordenada y sucia, qué sobra en ese área que te impide disfrutar de tu hogar.

 

Pregunta 3: Hay algo en alguna de esas 5 áreas que esté faltando y que te gustaría que hubiese?

Esta pregunta también puede resultar abstracta, así que te pongo otro ejemplo.

Ponte que una de las áreas más importantes es la pareja, pero sientes que falta pasión.

O una de las áreas más importantes es el trabajo pero te falta confianza, o incluso te falta un trabajo coherente contigo.

No hay respuestas buenas o malas, tú responde lo que te venga y sientas en este momento.

 

Pregunta 4: Hay algún área o aspecto de tu vida donde sientas que estás perdiendo tu tiempo? Tiempo que, por cierto, podrías estar aprovechando en una de las áreas que son más importantes para ti.

Por ejemplo, yo sentía que perdía demasiado tiempo eligiendo modelito, maquillándome y peinándome cada día, pero era superior a mí. Tenía que hacerlo para salir a la calle a gusto.

 

Pregunta 5: Si pudieses cambiar algo ahora mismo que te hiciera sentir más libre, qué sería?

En mi caso particular, para que te sirva de ejemplo también, si pudiese cambiar algo ahora mismo para sentirme más libre sería la casa en la que vivo.

Me gustaría tener un piso más pequeño, donde no tener la tentación de acumular cosas y donde poder poner la calefacción todo el invierno sin necesidad de arruinarme. Eso me haría sentir aún más libre.

 

 

CÓMO FUE MI INTRODUCCIÓN AL MINIMALISMO

Desde que descubrí el Minimalismo, sí!: me siento muchísimo más libre. Muchíiiiiiiiiisimo!

Al principio ni siquiera era un tema de identificarme con esta filosofía de vida, sino un tema de sentido común.

Es más, cuanto me dí cuenta de que el Minimalismo encajaba perfectamente con mis valores, ya llevaba años practicándolo en áreas de la vida donde nunca pensaríamos que se puede utilizar.

Cuáles son estas áreas donde parece difícil emplear el Minimalismo como estilo de vida?

Te las cuento:

 

EMOCIONES Y SENTIMIENTOS.

Este es uno de los aspectos donde más me gusta introducir el Minimalismo, tanto en mí como en mis alumnas o clientas.

Revisar emociones o sentimientos que ya han hecho su labor y que en ciertos momentos están sobrando, es una manera genial de auto conocerte y poder poner en perspectiva lo que necesitas de verdad.

Me dí cuenta de que las emociones más frecuentes que sentía respecto a mi familia, por ejemplo, me impedían ser feliz y me mantenían atrapada.

Aquí te lo cuento con más detalle. 

Liberarme de esos traumas también tenía que ver con Minimalismo, con centrarme en lo importante y descartar lo innecesario.

 

IMAGEN EXTERNA.

Seguro que en esto nos parecemos un poco…Demasiada presión social para que intentemos parecernos a las modelos de los anuncios continuamente.

El día que mandé a paseo todas las obsesiones que tenía con mi imagen exterior, no te imaginas lo que sentí.

De hecho, nunca podrá llegar a expresar con palabras lo que significaron para mí las siguientes situaciones:

  • Dejar de usar sujetador (antes tenía medio millón de ellos y ahora no me los pongo nunca de nunca).
  • Dejar de maquillarme (ahora estoy encontrando el equilibrio y muy de vez en cuando me pongo rímel o pinta labios.
  • Dejar de ponerme tacones (a esto sí que le he perdido la costumbre, aunque no descarto ponérmelos para salir a bailar salsa cuando tenga que ser).
  • Dejar de peinarme (ahora alterno los rizos a lo «afro» con el rapado veraniego).

He hecho alguna locura en mi introducción al Minimalismo. 

 

MUNDO MATERIAL

El día que empecé a desapegarme de mi obsesión con la imagen exterior, fui desprendiéndome de otras muchas cosas materiales que sentía que ya no necesitaba.

Así que monté un mercadillo en casa para vender la mitad de lo que tenía.

Durante los meses posteriores, mis pertenencias se fueron reduciendo a lo esencial.

También ayudó bastante el viaje que hice por Asia durante 7 meses. En la mochila no me hubiesen cabido todos los modelitos de la etapa anterior.

Pero la cosa no quedó solamente en reducir el volumen de mi armario, al mismo tiempo me hice mucho más consciente a la hora de comprar.

Aún me sorprendo empleando dinero en cosas que no necesito, pero cada vez me pasa menor.

No recuerdo el tiempo que hace que no me compro ropa, y si vienes a mi casa encontrarás varios armarios vacíos.

Lo que no es esencial no necesitas acumularlo.

Y hablando de mundo material, también se puede aplicar el Minimalismo al tema del dinero, sin necesidad de irte a vivir debajo de un puente.

 

IDEAS Y CREENCIAS.

También fue muy importante en mi proceso identificar qué ideas y creencias necesitaban aire fresco.

En muchas ocasiones, te aferras a tus creencias como si fueran verdades absolutas.

Incluso hay gente a quien le parece maravilloso «ser siempre igual», cuando en el cambio está la sal de la vida, la evolución.

Y yo también tuve que revisar mis propias creencias y valores para seguir evolucionando. Y lo sigo haciendo, por supuesto.

 

Aunque el Minimalismo se puede aplicar a absolutamente todo, aún hay determinados tópicos asociados a esta filosofía de vida.

Hay gente que piensas que para ser minimalista hay que tener la casa pintada de blanco, vender el coche, dejar de usar el móvil y vestir siempre con la misma ropa.

Y no.

Ser minimalista significa, como ya he dicho antes: identificar qué es lo que de verdad necesitas para realizarte como persona y vivir en paz, y sacar de tu vida todo lo demás.

 

QUÉ PUEDES HACER TÚ, AHORA MISMO, PARA SENTIRTE MÁS LIBRE A TRAVÉS DEL MINIMALISMO

Ya te he dado algunas pistas de por dónde debes empezar, con el ejercicio de las 5 preguntas.

Sin embargo, eso puede ser demasiado para hacer una introducción al Minimalismo.

Si quieres empezar con algo más fácil, haz lo siguiente:

  • Identifica esas 5 áreas más importantes de tu vida.
  • Identifica qué 5 cosas están sobrando en tu vida.

La lista de las áreas más importantes la dejas guardada para revisarla cuando sea conveniente.

Es con la lista de las 5 cosas que sobran con la que tienes que empezar.

Elige aquello de lo que te sea más fácil desprenderte, y hazlo!

Puede ser un jarrón, una persona, una idea o todo un armario lleno de trastos. Lo que tú quieras, pero que te resulte fácil.

Una vez que empieces, te sentirás un poquito más libre y querrás continuar liberándote de todo lo demás.

Eso sí, sea lo que sea de lo que te vayas a desprender, nunca olvides dar las gracias por los servicios prestados.

Puedes hacer un ejercicio simbólico y privado, donde agradezcas el tiempo compartido con «eso» de lo que te vas a desprender.

Incluso si es un recuerdo, puedes echarle una foto. Así podrás seguir recordándolo cuando te apetezca pero no te estará ocupando espacio.

Lo precioso del Minimalismo es que te desprendas de lo que ya no necesitas para que aquello que deseas, y aún no tienes, tenga espacio para entrar en tu vida.

Cuando tu vida es demasiado complicada, cuando la sientes demasiado llena, cuando ni siquiera tú puedes respirar, difícilmente habrá espacio para aquello que deseas.

Imagínate que cada vez una prenda de ropa se te queda pequeña o se estropea, la sigues guardando en el armario.

Llegará un momento en que el armario estará tan lleno que no te cabrá ni una prenda más.

Sin embargo, si identificas qué prendas son las que no te sirven y las sacas del armario, tendrás espacio para ese pantalón tan chulo que viste el otro día y que sí que necesitas.

O mejor aún…

Si sacas todas las prendas que ya no te sirven pero sigues teniendo muchas otras que te están estupendas, ni siquiera necesitas llenar esos espacios y puedes dejar que el armario respire porque no está tan lleno.

Entiendes lo que quiero decir?

 

PROPUESTA PERSONAL

Sé que ahora mismo tendrás un lío tremendo en la cabeza porque estás pensando en la cantidad de cosas de las que podrías desprenderte.

Es maravilloso que lo estés pensando porque eso significa que muy pronto te sentirás un poquito más libre.

Sin embargo, mi forma de introducir el Minimalismo en RevolucionaT y, concretamente, en el perfil de mujer con el que trabajo, va mucho más allá de lo que te he contado hasta ahora.

Porque si hay algo de lo que considero que una mujer tiene que desprenderse para empezar a ser más libre es de:

  • La culpa por no sentirte suficiente.
  • La creencia de que no eres suficiente.
  • Y todo lo que haces para intentar alcanzar esa idea de lo que deberías ser y no eres.

Y si en este momento estás pensando que eso a ti no te pasa, echa un vistazo a tu vida para que veas la cantidad de cosas por las que te sientes culpable sin darte cuenta. O la cantidad de cosas que haces para no tener que sentirte culpable si no las haces.

Cómo te desprendes de eso?

Primero poniéndole luz y volviendo a ser muy honesta contigo.

  • Observa en qué momentos sientes culpa y por qué.
  • Observa en qué momentos sientes que no eres suficientemente buena y qué pensamientos tienes al respecto.
  • Reflexiona a cerca de todo lo que haces para alcanzar una suficiencia que nunca llega.

Cualquier cosa que puedas eliminar de tu vida y tenga que ver con la creencia de que aún no eres suficiente, con el perfeccionismo o con la auto exigencia, te impulsará rápidamente hacia la libertad. 

Cuando sueltas la culpa, se abre todo un mundo de posibilidades ante ti.

Y si además de soltar la culpa consigues dejar despejados los armarios y reducir el número de cosas que compras sin necesidad, entonces ya casi puedes volar 😉

 

 

CONCLUSIONES

Como has podido comprobar, el Minimalismo es un estilo de vida saludable en todos los aspectos.

Algunos de sus beneficios más importantes son:

  • Sientes que tu vida es más ligera.
  • Dejas espacio y tiempo para lo que de verdad es importante para ti.
  • Le pones foco a lo que quieres en realidad.
  • Te conviertes en una persona mucho más independiente que no sufre por cosas materiales.
  • Mejora tu gestión emocional porque tienes menos preocupaciones y compromisos.
  • Se reducen enormemente la ansiedad y el estrés.

Y estos son solo algunos de los beneficios que yo misma he obtenido.

Así que ponte manos a la obra, decide cuáles son tus prioridades para que puedas enfocarte en ellas, y elige qué va a ser lo que primero salga de tu vida.

Solo necesitas dar un pequeño paso, una breve introducción al Minimalismo, y empezarás a sentirte tan libre que no podrás parar.

 

Ahora cuéntame,

Conocías el Minimalismo existencial?

Lo aplicas en algún área de tu vida?

Hay algún punto de los que he relacionado con el Minimalismo que te haya sorprendido?

Deja tu comentario y seguimos hablando 🙂

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: introduccion al minimalismo, minimalismo, minimalismo existencial, minimalismo para mujeres, que es el minimalismo, quiero ser libre

EL MINIMALISMO Y TUS CREENCIAS LIMITANTES ACERCA EL DINERO

6 mayo, 2019 por taniacarrasco 4 comentarios

Se ha puesto de moda esto de hablar sobre las creencias limitantes acerca del dinero.

Y qué quieres que te diga…Hay algunas modas que dan un poco de miedo.

Por qué?

Porque existen ciertas modas «sanas», como esta del Minimalismo del que hablamos tanto en RevolucionaT.

Y hay otras modas que llegan simplemente para manipularte, no para hacerte la vida más fácil.

Si ya practicas el Minimalismo, te habrás dado cuenta de que puedes aplicarlo a todo. También, por supuesto, a tus ideas, creencias y pensamientos.

Y respecto a las creencias limitantes con el dinero, y el Minimalismo, ocurre una cosa:

En el camino por querer deshacerte de las creencias limitantes que te dicen que no puedes tener más dinero porque no te lo mereces, te cargas con otras creencias relacionadas con la culpa por no conseguir tener más dinero a pesar de intentar cambiar de creencias.

Un círculo vicioso que algunas personas se están empeñando en alimentar para que la abundancia les llegue a ell@s antes que a nadie.

Y esto está bien, cuidado! Que no es una crítica.

Yo también quiero que me llegue el dinero a espuertas a mí.

Pero cuando manipulas a la gente para que se sientan culpables por no tener más dinero, ya te estás pasando.

Así que fíjate:

  • Poco a poco te vas haciendo minimalista, te vas deshaciendo de lo que te sobra.
  • En el camino, te das cuenta que si hay algo que te sobra son precisamente creencias limitantes.
  • Al mismo tiempo, comprendes que el dinero es energía y que puedes generarla en grandes cantidades. Que ser minimalista no significa vivir en la escasez económica ni mucho menos.
  • Pero te empeñas en seguir los pasos de otras personas y, cuando no lo consigues, además de seguir teniendo las mismas creencias limitantes que antes, encima te generas más culpa por no estar consiguiéndolo.

Por este motivo he querido grabarte un vídeo, con la intención de que te relajes un poco con el tema y comprendas que la abundancia y las creencias limitantes acerca del dinero, quizá no son como pensabas.

Y sí, esto tiene que ver, y mucho, con el Minimalismo:

Dejar atrás lo que no aporta nada a tu vida, y dejar espacio para que lo nuevo, lo que de verdad quieres SER, tenga espacio para desarrollarse.

Hoy quiero que dejes atrás ciertas creencias limitantes acerca del dinero. Si no es de una manera, de otra. 

Te veo en el vídeo y te espero en los comentarios.

Y, por favor, si te gusta, compártelo y suscríbete al canal de YouTube 😉

Aquí tienes el video. 

 

Feliz semana!

 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: abuandancia, como ganar más dinero, creencias limitantes acerca del dinero, creencias limitantes sobre el dinero, minimalismo, minimalismo existencial

MINIMALISMO DE LA IMAGEN: Reflexiones de una mujer "sin un pelo de tonta"

5 agosto, 2018 por taniacarrasco 42 comentarios

Imagínate que vas por la calle y de repente te encuentras con una mujer joven totalmente calva…

Sé sincera, ¿qué es lo primero que pensarías?

El artículo de hoy te va a sorprender, porque además de acuñar un término poco utilizado como el «minimalismo de la imagen», va con vídeo incluido 😉

Pero para ver el vídeo tendrás que leer hasta el final. ¡No vale hacer trampas e irte directamente para abajo!

Hace tiempo que aviso de mis intenciones de raparme la cabeza…

  • Si ya me habías escuchado comentarlo en alguna ocasión y me conoces un poco, sabías que este momento llegaría.
  • Si ya me habías escuchado comentarlo y no me conoces mucho, pensarías que me estaba marcando un farol para atraer seguidoras.

¿Qué piensas ahora?

¿Crees que una mujer es capaz de quedarse calva por elección personal?

¿Qué motivos llevan a una mujer sin problemas de alopecia a raparse la cabeza?

¿Habías escuchado hablar de minimalismo relacionado con la imagen física?

Vamos a responder juntas a estas cuestiones en un momento, sigue leyendo.

QUÉ ES ESTO DEL MINIMALISMO DE LA IMAGEN

Estoy convencida de que te identificas mucho con tu imagen física:

  • Con tu forma de vestir
  • Con tu forma de peinarte
  • Con tu color de pelo (con tu tinte habitual quiero decir)
  • Con el modo en que te maquillas
  • Con aquellos aspectos de tu imagen que sabes que gustan a los demás

Pero déjame que te haga una pregunta: ¿cuáles de todos esos aspectos relacionados con tu imagen mantendrías igual si vivieses sola en una isla desierta?

Hace tiempo que te planteo estas cuestiones porque son temas que a mí me preocupan mucho y me hacen cuestionarme mis propias contradicciones.

Por eso he querido ir un poco más allá con el tema del minimalismo e inaugurar el «minimalismo de la imagen».

El minimalismo es mucho más que aprender a decorar tu casa con pocos objetos y superficies blancas. De hecho, suelo trabajar con temas de minimalismo en mis cursos de autoestima porque te ayuda de verdad a liberarte de cargas innecesarias.

Pero lo que te voy a contar va mucho más allá.

El minimalismo existencial, desde mi punto de vista, implica:

  • Decir adiós a objetos que no utilizas pero también…
  • Despedirte de creencias limitantes
  • Dejar atrás compromisos absurdos
  • Aprender a gestionar tus emociones para centrarte en las que te ayudan a evolucionar
  • Y acabar con relaciones tóxicas que no te llevan a ningún sitio

Pero, ¿dónde cabe aquí el minimalismo de la imagen?

El minimalismo de la imagen va todavía más allá y significa:

  • Dejar de comprar ropa que no necesitas
  • Dejar de usar maquillaje y productos que en realidad solo son un parche para temas más profundos
  • Desapegarte de la identidad que te aporta esa imagen física que te has creado con los años
  • Practicar de verdad eso que dicen de que «lo que importa es el interior»
  • Sin que eso implique estar dejada de la mano de Dios, ni una excusa para pasar de cuidarte

¿Pero acaso «cuidarte» es ir a la peluquería cada mes a taparte las canas?

Creo que utilizamos el término «cuidarnos» de forma bastante frívola.

Y perdóname que te lo diga así, de sopetón.

EN QUÉ TE PUEDE AYUDAR A TI EL MINIMALISMO DE LA IMAGEN

Como te comentaba antes, trabajo los temas de minimalismo en mi curso online TúPoderosa, porque he comprobado en mis propias carnes lo mucho que ayuda.

¿A qué ayuda?

1. A emplear tu energía en lo verdaderamente importante

Porque si dedicases menos energía en estar visualmente aceptable, podrías emplear ese tiempo y esa energía en temas que te hagan sentir bien de verdad, por dentro y por fuera.

2. A sentirte guapa y libre al mismo tiempo

Porque tienes que reconocer, siendo muy honesta contigo misma, que muchas veces sentirte guapa implica ser prisionera de tu imagen.

Arreglarte, porque los demás tienen que verte medianamente decente, hace que sacrifiques tu libertad. Esa libertad que sientes cuando vas recién duchada y descalza por la casa.

Justo ayer escuchaba a un artista decir: «El grado de vergüenza que sientes al ponerte cierta ropa es directamente proporcional a la comodidad que experimentas».

Es decir, si sales a la calle con ropa con la que te da vergüenza que te vean, con total seguridad esa ropa es de lo más cómodo que tienes.

3. A dejar a un lado las opiniones ajenas para estar a gusto contigo misma

Porque cuando superas esa fase de tener que gustarle a todo el mundo, te sientes mucho más a gusto y en coherencia contigo misma. Empiezas a ser tú, sin ataduras, y eso te hace sentir genial, te empodera.

4. A tener espacio para que lo nuevo llegue a tu vida

Ya habrás escuchado esa frase que dice que «para que lo nuevo entre lo viejo tiene que salir».

Y, en este caso, si lo relacionamos con el minimalismo de la imagen, si estás buscando una evolución personal como mujer pero te sigues identificando con tus antiguos patrones de imagen, la mujer radiante, libre y plena que vive debajo de eso no puede salir, no puede manifestarse.

Se pasa años esperando a que la dejes abrir sus alas.

5. A quitarte de encima la ansiedad, el miedo y la inseguridad

No me digas que no es estresante cuando se te pegan las sábanas, te levantas con media hora para llegar al trabajo y sabes que tardas una hora y media en arreglarte en condiciones. ¡Ansiedad profunda desde bien entrada la mañana!

O ¿qué me dices de cuando tienes una boda a las 12 del medio día y te han dado cita en la peluquería a las 10?

Ya sabes que vas a tener que correr como una campeona y que, aún así, no vas a ver a la novia llegar a la Iglesia (al juzgado o donde sea).

Ahora piensa que tienes esa misma boda a las 12 del medio día pero que no tienes que ir a la pelu, ni pintarte las uñas, ni ponerte kilos de maquillaje…¿No respiras mejor?

Vale, vale, quizá no respiras mejor porque estás pensando en ¡cómo se me ocurre plantearte que vayas a una boda sin maquillar y sin peinado de peluquería!

Piensas en las miradas de los demás y eso es lo que te genera la ansiedad.

Ahora piénsalo e imagina que a los demás les diese exactamente igual cómo vas a la maldita boda…

No, no me engañes, ni te engañes a ti misma diciendo que te da igual lo que piensen los demás, que te arreglas por ti.

Carcajada + pedorreta 😉

Eso mismo pensaba yo hasta que me atreví a decirme la verdad.

Pero no te equivoques, no quiero dejar a las peluquer@s y maquillador@s sin trabajo.

Me parece un trabajo muy digno y me parece estupendo que te arregles.

Lo que no me gusta es que te mientas, como me he estado mintiendo yo durante tantos años…

Esto no es un tema superficial con el que quiero hacer que te vuelvas hippie. Yo no soy hippie, me pongo cacao de labios cuando grabo los vídeos para ti 😉

Una de las ideas que quiero transmitirte es que quizá, solo quizá, ponemos demasiada energía en temas que no nos ayudan, y podríamos equilibrar esas energías para sentirnos mejor con nosotras mismas.

Cada una en la medida que considere, no hay un baremo exacto para esto. Ni ninguna mujer es mejor o peor que otra según su grado de maquillaje.

CÓMO PRACTICAR EL MINIMALISMO DE LA IMAGEN SIN SENTIRTE MAL

Las dos somos conscientes de las ampollas que puede levantar todo lo que te estoy contando.

¡No importa!

Está bien que aparezcan resistencias y pensamientos contradictorios porque eso significa que hay algo que se está removiendo.

Tampoco importa si estás de acuerdo conmigo o no, lo importante es que haya respeto entre nosotras. Y me consta que de eso hay mucho.

Te respeto en pelotas y cuando vas maquillada como una puerta. ¡Cómo no lo voy a respetar si yo también he pasado por ahí! Respeto absoluto ante todo.

Pero por si quieres experimentar con el minimalismo de la imagen como estoy haciendo yo desde hace unos años, te cuento las ideas que yo ya he utilizado y que me hacen sentirme mejor cada día:

RESPECTO A LA ROPA

  • Prueba a no llevar sujetador a ver cómo te sientes: al principio será raro, como todo o nuevo.
  • Compra solo la ropa que verdaderamente necesitas y la que llevas años sin ponerte dónala.
  • Usa prendas que te hagan sentir bien (por ejemplo, yo ya no me siento cómoda llevando ropa ajustada)
  • Deja espacio en los armarios para que la energía circule, para que la ropa que te gusta respire. Para que al abrirlo no tengas que perder 30 minutos, sino más, en elegir qué diablos te pones.

RESPECTO AL MAQUILLAJE Y LOS POTINGUES VARIOS

  • Quédate con los mínimos productos posibles: tienes cajas, cajones, neceseres, llenos de potingues. Fijo que algunos hasta se te caducan porque a mí me pasaba muy a menudo.

Y no solo te hablo de maquillajes, lacas de uñas, pintalabios, rímeles, coloretes, sombras de ojos y los diferentes utensilios para distribuir esos potingues por tu cara…

También te hablo de todo tipo de mascarillas, champús, sérums (¿para qué narices sirven los sérums?), cremas de todas las clases, para cada momento del día y para cada parte del cuerpo.

Hace mucho tiempo que solo tengo en casa un rímel y una barra de labios, ¡te lo juro!

  • Prueba a dejar de maquillarte por inercia y hazlo solo cuando de verdad sientas que tienes que hacerlo.

RESPECTO A TU PELO

  • Prueba a amar tu pelo tal y como es, sin más: si hay canas, hay canas. No veas cómo me brilla el pelo y lo mucho que me gusta cuando un hombre me dice: «¿es que no te piensas tapar las canas?». ¡Pues no cenutrio, no!
  • Minimiza el tiempo que malgastas arreglándolo. Seguro que hay un camino más corto que te deja tiempo para otras cosas que te apetecen más.

RESPECTO A LAS CREENCIAS QUE TE DICEN QUE TE VES FEA AL NATURAL

Y esta es la parte más importante.

Ya sabes que:

  • Cuando te miras al espejo recién levantada
  • Cuando alguien te ve sin maquillar
  • Cuando tu cabeza parece un nido de cigüeñas esquizofrénicas
  • Cuando te has probado mil modelitos y hoy es uno de esos días en que nada te sienta bien

Tu cabeza juega en tu contra y te bombardea con pensamientos como:

  • «¿No te de verüguenza salir así a la calle?»
  • «¡Qué van a pensar de ti en la oficina con las ojeras que tienes hoy!»
  • «¡Madre mía que pelo más asqueroso!»
  • «Espero no encontrarme con alguien conocido con las pintas que llevo».

Esta es la parte más importante del minimalismo de la imagen y que podrás aplicar en cada ámbito de tu vida.

¡Tu mente la controlas tú!

¡Ya es hora de dejar de leer sobre temas relacionados y empezar a practicarlo!

Prepara a tu mente para verte genial, esté como esté tu aspecto exterior.

  • Dile lo bonita que eres incluso cuando no te maquillas
  • Sonríele a esa mujer hermosa y natural que ves por las mañanas en el espejo
  • Pásate por el arco del triunfo los estereotipos y viste como te dé la real gana

¡Libérate!

Cuesta un poco pero luego no hay vuelta atrás y te sientes como una diosa.

Y cuando alguien ose a hacer algún comentario hiriente sobre lo verdaderamente guapa y libre que eres al natural…

Carcajada + pedorreta 😉 ¡Y sonrisa triunfal!

Si es necesario puedes aderezar la mezcla con un «¡Que te den, cenutrio!», así por lo bajini. Poco a poco no te hará ni falta, pero al principio ayuda.

POR QUÉ NO ENCONTRARÁS NINGUNA OTRA PUBLICACIÓN QUE HABLE DE MINIMALISMO DE LA IMAGEN SI YA ESTÁ TODO INVENTADO

(Ya queda menos para la vídeo-sorpresa, aguanta un pelín)

¿Cuántas veces has escuchado eso de «ya está todo inventado»?

¡Millones!

Y el caso es que no, no está todo inventado.

Cuando te hablo de «ser tú misma», no me refiero solo a la imagen exterior que muestras al mundo para sentirte más querida.

Hay muchas más cosas en el «ser tú misma»…Frase gastada y agotadoramente aburrida, por cierto.

En el caso de los estereotipos femeninos, el «ser tú misma» se puede convertir en una cárcel preciosa, que te dicen por todos lados que es la única a la que puedes aspirar.

Es por eso que si pones en google «minimalismo de la imagen», te saldrán un montón de publicaciones relacionadas con el minimalismo en la fotografía.

Es por eso que si pones en google «mujeres calvas» o palabras parecidas, solo te saldrán artículos de enfermedades y situaciones que llevan a las mujeres a estar calvas, en contra de lo que desearían.

Bueno, con suerte encuentras un montón de imágenes de modelos que han tendido la osadía de afeitarse la cabeza y ser solo «un poco» criticadas.

Tenemos, las mujeres, demasiado interiorizado este tema de la imagen exterior según han decidido las empresas publicitarias.

Por eso es raro, rarísimo, que una mujer se plantee raparse la cabeza de forma voluntaria (claro claro, a no ser que sea lesbiana…¿perdón?).

Por eso no encontrarás muchas publicaciones de este tipo porque está muy mal visto pensar así.

  • Está mal visto por la sociedad en general, que no se cuestiona los estereotipos puesto que mantienen las cosas tal y como están. A nadie le gusta salir de la zona de confort a lo loco.
  • Está mal visto incluso por las mujeres que son prisioneras de su imagen, porque se sienten atacadas y muertas de miedo al pensar que se tendrían que deshacer de esa imagen «tan bonita» con la que se sienten protegidas.
  • Está mal visto ir contracorriente porque eso provoca que otras personas se tengan que hacer preguntas para cuyas respuestas pueden no estar preparadas.

Justo la semana pasada, una «amiga» me enviaba una foto muy bien peinada y maquillada, donde decía algo así como: «Hoy es el día de mimarme, de cuidarme, de sentirme una mujer completa…».

Mientras sigamos pensando que para ser una mujer completa hay que ir a la última moda, pintarse el ojo y arreglarse bien el pelo…¡estamos jodidas!

Una mujer completa puede ir maquillada o no, pero no son esos detalles los que le dan valor.

Tú no tienes más valor que yo por ir más mona, ni yo tengo más valor que tú por dejar de maquillarme.

CONCLUSIONES

Me he dado cuenta de que cuando escribo este tipo de artículos el tiempo se congela para mí.

Me duelen, pero me motivan y los disfruto muchísimo.

Casi tanto como cuando alguien me pregunta por algo relacionado con el feminismo.

Soy yo, me sale mi vena reinvindicativa que, por otro lado, al mismo tiempo es más respetuosa que nunca.

Y ha llegado el momento de mostrarte la vídeo-sorpresa que te comentaba al principio.

Porque creo que sería un grandísimo paso para ti como mujer, empezar a hacer las cosas porque quieres.

Que cuando vayas a hacer algo pienses: «¿Lo hago porque me apetece o por complacer a alguien? ¿Esto que voy a hacer me hace más libre?».

Desde que yo misma me hago este tipo de preguntas todo está cambiando mucho.

Puedes verlo aquí y contarme qué te parece todo esto. Te advierto que este vídeo puede herir tu sensibilidad y el de las personas de tu alrededor.

Y cuando termines de verlo:

  1. Respóndeme a la pregunta que te planteo por favor: ¿qué quedaría de ti si todo lo relacionado con la imagen física con la que te identificas cambiase?
  2. Comparte si crees que es útil para alguien
  3. No te olvides de suscribirte al canal para que los vídeos te lleguen directamente

Un abrazo muy grandísimo

Tania

P.D: Como sabes, me dedico al mundo de la salud física a través de la Nutrición y el Método Pilates, pero no para seguir fomentando tu autoexigencia sino tu salud real.

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: autoestima, autoestima femenina, como liberarse de los estereotipos, minimalismo, minimalismo de la imagen, minimalismo existencial, mujeres libres y valientes

MI MADRE DESTRUYÓ MI AUTOESTIMA Y NO CONSIGO SUPERARLO

30 octubre, 2017 por taniacarrasco 333 comentarios

Aunque jamás he pensado que mi madre destruyó mi autoestima, cada día soy más consciente del importante papel que tuvo ella en la formación de mi falsa autoestima.

En este artículo vas a entender mucho mejor de dónde viene lo poco que te respetas, aunque a los demás les hayas hecho creer lo contrario.

Ten en cuenta que el conocimiento es poder y cuanto más sepas de ti misma más capacitada estarás de afrontar las consecuencias de todo lo que ha pasado en tu vida, para poder seguir hacia delante.

Normalmente le doy mucha caña a la figura del padre, porque parece ser que es de donde vienen la mayoría de tus traumas, pero no es así. No puedes dejar pasar el papel de tu madre porque es tanto o más importante que el de tu padre.

Como mujer adulta que eres, mantienes con tu madre una buena relación. Para ti es una relación especial, es la única madre que tienes y tendrás nunca, pero en el fondo le guardas ciertos rencores que se manifiestan más a menudo de lo que te gustaría.

Con tu madre tienes un conflicto, un amor-odio que afecta a tu vida más de lo que te imaginas.
Si la relación con tu madre no es sana, es muy complicado que puedas tener paz mental en el resto de áreas de tu vida.

Sí sí:
–          Tienes mucho estrés
–          A tu día le faltan horas
–          Y no duermes lo suficiente, de acuerdo.

Pero los conflictos internos, los conflictos emocionales, eso que no se ve a simple vista, afecta mucho más a tu vida que el hecho de que el día solo tenga 24 horas.

Por eso, como este es un proyecto que tiene como base la salud física, sé que sin salud física no hay salud emocional y hay que mirar esto de cerca.

Porque si cuidases tu cuerpo físico podrías ver las cosas de otra manera.

Esto no significa que con salud física ya no vayas a tener problemas que resolver. Siempre los habrá. Pero te resultarán más sencillos.

El rencor, el odio, los traumas…ocupan un espacio precioso que hay que llenar con amor y salud.

¡Va!, arremángate que empezamos 😉

POR QUÉ MI MADRE DESTRUYÓ MI AUTOESTIMA

No se me ocurre tarea más difícil en el mundo que el hecho de ser madre, y para eso no hay carreras universitarias, ni formaciones de ningún tipo.

Cualquier mujer, capacitada biológicamente, puede ser madre sin pasar ningún test psicotécnico («muy mal yaya», como dice mi sobrino cuando regaña a su abuela). Partiendo de esa base ya vamos mal, así que corramos un estúpido velo.

Que tu madre se quedase embarazada de ti y decidiese dar a luz y criar una hija, no significa que tuviese en sus manos las herramientas, ni los conocimientos necesarios, para sacar matrícula de honor en esa licenciatura de la vida.

Ser madre es una carrera de fondo donde se empieza con lo que tienes y se van adquiriendo aprendizajes por el camino, o eso me han contando. Si tienes esto en cuenta, está claro que la autoestima que tuviese tu madre mientras te gestaba y te criaba, influirá directamente en ti.

¿Conoces alguna mujer que se haya puesto a trabajar su autoestima para que esta influyera positivamente en su bebé? Si conoces alguna házmelo saber por favor, quiero entrevistarla.

Si quieres ser una de las entrevistadas necesitarás empezar por aquí. 

Con esto no trato de criticar a ninguna madre, ni muchíiiiisimo menos. Solo reitero la idea de que a tu madre nadie la preparó para serlo y como no la enseñaron a darle importancia a estas cuestiones ni siquiera se las planteó.

Así que si tu madre destruyó tu autoestima es porque la suya ya estaba destruida de antemano y quizá ni siquiera lo supiese.

MADRE TÍMIDA Y VERGONZOSA

Existe una relación directa entre la timidez y la vergüenza con la baja autoestima.
Si tienes una madre tímida, como es mi caso, habrás comprobado que eso te afecta en muchas ocasiones. Más que afectar, incluso te molesta.

Aunque hasta ahora no lo sabías seguro, intuías que el hecho de que tu madre fuese tan tímida tenía mucho que ver con su falta de autoestima.

Es una mujer que quiere pasar desapercibida a toda costa, que se mete en su mundo y no hay narices a que nadie más entre allí.

Como tu madre no se considera valiosa, ni digna de amor, crece para dentro, escondiendo sus temores, deseos o necesidades para que nadie le haga daño. Y eso te afecta. 

A pesar de que tú hayas desarrollado más el rol de tu padre, sobre todo porque estaba ausente y alguien lo tenía que desarrollar, la personalidad de tu madre también te marcó.

Si tu madre se encerraba en sí misma porque no se creía valiosa, tú interiorizaste eso tanto para adquirirlo como para cuestionarlo. Si ella no creía en sí misma ni en sus capacidades, ¿qué confianza en ti misma ibas a tener tú?

La diferencia principal es que como la actitud de tu madre te daba tantísima rabia, tú decidiste hacer lo contrario: tapar tus inseguridades para que nadie se diese cuenta, hacerte la dura, no como ella.

Entre madre e hija existe un importante vínculo de identificación que no puede pasarse por alto.

ACTITUDES DE TU MADRE QUE INFLUYERON NEGATIVAMENTE EN TU AUTOESTIMA

1.      NO VALORABA TUS LOGROS

Cuando eras pequeña te esforzabas mucho para que tu madre valorase todo lo que hacías, pero eso no ocurría. Pocas veces tu madre te dio palmaditas por lo bien que lo habías hecho. Pocas veces te dio un abrazo por el esfuerzo realizado o por hacer lo que te había pedido que hicieses.

2.      TE COMPARABA CONSTANTEMENTE

Sin intención de herirte ni de mermar tu autoestima, tu madre te comparaba continuamente con tus hermanas, tus amigas o incluso con ella misma. Lo de los demás siempre estaba mejor que lo tuyo, o al menos esa fue la lectura que tú hiciste.

3.      TE PONÍA ETIQUETAS

Llevas grabadas a fuego muchas de las palabras que te decía tu madre en tu infancia:

–          “Eres mala”
–          “Eres torpe”
–          “Eres gordita”
–          “Eres egoísta”
–          “Eres mal educada”
–          “Eres incorregible”
–          Etc, etc, etc.

Y como las cosas buenas no se te decían para que no te las creyeses, lo único que pudiste interiorizar fue todo lo malo que te atribuía tu madre. Así eras tú, una persona horrible y, sin querer, te lo creíste.

4.      TE EXIGÍA COSAS QUE NO IBAN CON TU EDAD

Entre la timidez de tu madre y el hecho de que ella no se valoraba lo suficiente, seguro que te tocó en más de una ocasión hacer cosas que te quedaban grandes como niña que eras.

Pero tú parecías tan echada para delante y tu madre tan echada para atrás, que parecía la mejor elección.

Tanto si lo hacías mal, como si lo hacías bien, tú sentirías que la presión que se ponía sobre ti era demasiado grande y que no podías llegar a alcanzar las expectativas que tu madre tenía puestas en ti.

Volverías a fracasar y tu mamá te añadiría otra etiqueta, la de inútil por ejemplo, para ir haciendo la lista cada vez más grande.

5.      NO TOLERABA TUS ERRORES

En tu casa los errores se pagaban, el castigo era seguro. Independientemente de que asumieras el error o no, tenías que pagar por ello. Eso te llevó a pensar que tu madre sólo toleraba la perfección. Había que ser perfecta o encerrarse en una misma, como hacía ella.

6.      NO TENÍA NINGUNA CREDIBILIDAD

Lo que no se puede cuestionar es que tu madre quería lo mejor para ti, aunque le venía muy bien la frase “haz lo que yo digo pero no lo que yo hago”.

–          Quería que estuvieses bien alimentada.
–          Quería que sacases buenas notas para que tuvieses un futuro mejor que el suyo.
–          Quería que hicieses ejercicio para estar más sana.
–          Quería que encontrases un buen hombre que no te reprimiese.
–          Quería que fueses una mujer libre.

Sin embargo, lo que quería para ti no era lo que hacía para ella. Tu madre:

–          Se alimentaba fatal.
–          Fumaba muchísimo.
–          Le costaba la misma vida hacer ejercicio.
–          Se sometía a tu padre.
–          Se enfadaba si pasabas demasiado tiempo con chicos…

Todas esas actitudes te confundían bastante y no sabías qué era lo mejor ni por qué tu madre actuaba así.

7.      SE APOYABA DEMASIADO EN TI

En lugar de tener en cuenta sus propias capacidades o apoyarse en tu padre, o en cualquier amiga o familiar, tu madre te tenía a ti como:

–          Amiga
–          Confidente
–          Cuidadora
–          Hombro para llorar
–          Lugar donde volcar sus frustraciones…

Y eso es demasiado trabajo para cualquier niña.

No podías llegar a todo, era imposible, así que tu autoestima caía en picado junto con la de tu madre. Aunque a ella se le notase muchísimo y tú lo supieras disimular mejor.

MI MADRE DESTRUYÓ MI AUTOESTIMA PERO LO VOY A SUPERAR

Y no te queda otra más que superarlo si quieres ser feliz y vivir tranquila.

La figura de una madre es la figura más importante de la vida de cualquier persona. La relación que tengas con ella, tanto si está físicamente contigo como si no, será crucial para que seas una mujer emocionalmente sana.

Tu madre hizo muchas cosas «mal», con toda seguridad. Eso mismo te pasa a ti, o te pasará, con tus hij@s porque nadie es perfecta. Sin embargo, hay muchas cosas que puedes hacer por ti para que esa falta de autoestima que te persigue desde la infancia se convierta en un amor profundo hacia ti misma y hacia todo lo que te rodea.

Voy a contarte lo que yo he tenido que hacer en mi camino para dejar de guardarle rencor a mi madre por todo lo que creía que había hecho mal:

1.      SUELTA EL VICTIMISMO

Sé que durante mucho tiempo te ha venido genial pensar que la culpa de muchos de tus problemas la tenía tu madre. Has intentado cambiarla a ella para que así te afectasen menos sus cosas, pero no ha funcionado.

Ya eres una niña grande, así que responsabilizar a los demás por los problemas que tú tienes no te va a permitir avanzar.

¡Deja de hacerte la víctima y toma las riendas!

Sé que dicho así suena muy duro. A mí también me ponían de muy mal humor las personas que me decían esto…Hasta que me di cuenta de que tenían toda la razón.

2.      PONTE EN SU LUGAR

Si eres madre, ahora entenderás mucho mejor todas esas cosas que pensabas que tu mamá hacía mal puesto que ya lo estás viviendo en tus propias carnes.

Si no eres madre, lo único que tienes que hacer es empatizar un poco con ella. Si no conoces demasiado de su historia pregúntale:

¿Cómo era la relación con sus padres, tus abuelos?

¿Cómo fue su infancia?

Intenta comprender de dónde viene su comportamiento, porque todo el mundo tiene una historia que le lleva a actuar de una u otra manera.

La gente no es mala o bueno porque sí, y conocer su historia te ayudará a entender muchas cosas, aunque eso no significa que tengas que compartirlas.

3.      PERDONA

¡Menuda herramienta esta del perdón! Maravillosa en cualquier etapa de tu vida para sanar tus heridas y seguir adelante.

Al fin y al cabo tu madre tampoco es mala, todo lo contrario, es una buena mujer que ha querido hacerlo siempre lo mejor que ha podido (sabido).

Soy consciente de que esto sueña ñoño, pero tengo plena conciencia de que todo el mundo lo hace lo mejor que sabe y puede. No se pueden hacer las cosas de otra manera.

Con tu madre pasa lo mismo. Puede ser un auténtico monstruo, pero se debe a que no sabe hacerlo mejor. Qué podemos hacer ante esto???

Liberar de culpa a tu madre, te libera de culpa a ti. Es un proceso que hay que asumir para afrontar estos traumas infantiles, por mucho que en los momentos de dolor lo único que quieras es hacerla desaparecer.

4.      ESTRECHA LOS LAZOS CON ELLA

Quizá pienses que con perdonar, a tu manera, está el tema resuelto. Sin embargo, no consigues olvidar todas esas cosas que te han hecho tener la autoestima tan baja.

Si perdonas de verdad, lo siguiente será estrechar lazos con tu madre y dejar de criticarla para reforzar sus virtudes.

Así la estarás ayudando a ella a sanar su autoestima y te vendrá genial a ti para que su forma de actuar deje de perjudicarte.

Pero si has decidido que es mejor alejarse, este apartado te lo saltas del tirón. 

Cuidado aquí porque estamos hablando de relaciones madre-hija «normales», no estoy hablando de madres narcisistas ni psicópatas. Si tu madre es de este tipo lo único que se puede hacer en la mayoría de los casos (además de aceptar el pasado y perdonar) es marcharte lejos.

5.      APRENDE DE SUS ERRORES PARA QUE TÚ NO LOS COMETAS

Mi madre siempre me ha dicho que ella hacía conmigo y con mis hermanas justo lo contrario de lo que habían hecho con ella. O al menos eso intentaba.

En la realidad, no es frecuente conseguir hacer justo lo contrario que han hecho contigo, porque muchas de esas cosas van grabadas en tu ADN y te salen de forma inconsciente.

Por eso, en cuanto a la libertad que tenía o los consejos que recibía, probablemente eran totalmente contrarios a lo que mi abuela hacía con ella. Sin embargo, en otras muchas cosas como no valorar los logros por ejemplo, mi madre no pudo evitar comportarse como mi abuela porque no era consciente de que lo hacía.

Así que observa bien todas esos comportamientos de tu madre que consideras que han acabado con tu autoestima y refuerza el aprendizaje para que tú no hagas lo mismo.

Está claro que si consigues sanar tu autoestima dañada podrás ser una madre que sepa reforzar la autoestima de tus churumbeles.

Puede que gracias a tu madre tengas baja autoestima, pero también tienes otras cosas: gracias a tu madre, entre otras cosas, has conseguido convertirte en la mujer admirable que eres hoy. Eso que tampoco se te olvide.

Me gustaría volver a hacer una aclaración en este punto porque no se ha entendido nada bien…

Obviamente, cada cual entiende lo que quiere en función de su percepción de la realidad. Así que te cuento cuál es mi percepción.

Lo que quiero decir aquí no es que gracias a lo mal que se ha portado tu madre tú has conseguido ser lo que eres.

No es así exactamente…

Lo que quiero decir es que, todo lo malo que ocurre en la vida te sirve para hacerte más fuerte, más consciente y estar más preparada. Así que de absolutamente todo se puede aprender y agradecer.

CASO REAL

Tengo una amiga, una tía genial, cuya madre es el vivo ejemplo de todo lo que te estoy contando. Desde luego no es mi caso, pero sí que es un caso que me pareció muy claro cuando lo conocí.

La primera vez que mi amiga me presentó a su madre, lo primero que esta señora le dijo a su hija fue:

“Mira qué delgadita está tu amiga, no como tú que cada vez estás más gorda”.

¡Me quedé helada!

Mi amiga se lo tomó tan bien que no me preocupé demasiado, es una chica que tiene muy claras cuáles son sus cualidades y que necesita mucho más que eso para que le afecte a su autoestima.
Pero no me quiero ni imaginar qué tipo de infancia tuvo que pasar siendo criticada y comparada constantemente y de una forma nada suave, y de qué manera tuvo que protegerse de aquello para convertirse en la mujer y madre maravillosa que es hoy.

CONCLUSIONES

Como se explica perfectamente en este artículo:

“La autoestima es uno de los componentes de la vida afectiva que tienen mayor incidencia en la calidad de vida de las personas y en su salud”.

Afirmación que me parece indiscutible porque he podido comprobarlo a lo largo de toda mi trayectoria, y por eso me dedico a lo que me dedico hoy en día.

No sólo tus padres han tenido influencia en tu autoestima, aunque la infancia sea el período más crucial para ello. Hay muchos factores que afectan día a día a que te sientas bien contigo misma.

No pretendo en ningún caso decirle a ninguna madre cómo tiene que actuar, qué podría haber hecho mejor, ni me atrevería jamás a hacerlo puesto que no me puedo poner en su piel.

Mi intención es que tú entiendas que aunque la figura de tu madre tuvo mucho que ver con la autoestima que has desarrollado, a día de hoy solo lo puedes mejorar tú.

Si crees que tienes una vida mediocre y que tu madre, o cualquier otro factor externo, tienen la culpa de algo, te va a resultar muy complicado avanzar.

Cuando más te quieras más querrás a los demás y, por tanto, la relación con tu madre mejorará muchísimo.

La relación con mi madre es muy buena, tengo una madre especial aunque sea un poquito “padentro”. Pero desde el momento en que yo empecé a valorarme, empecé a valorarla más a ella también.

Juntas, hemos hecho un camino de desarrollo personal y de evolución constante que me hace seguir aprendiendo de ella cada día y dar gracias por la madre que tengo. 

Tanto tu madre como la mía se dejaron la piel para darnos lo mejor, las heridas sólo sanan cuando perdonamos lo “malo” y recordamos lo bueno.

“Gracias mamá por inspirarme a convertirme en una gran mujer como tú”.

Y para finalizar ¡me encantaría verte en los comentarios!

Tienes que tener en cuenta que:

  • NO SOY PSICÓLOGA
  • NI PSIQUIATRA

Soy Terapeuta Nutricional, Instructora Física y Coach, pero sé muy bien de lo que hablo porque lo he trabajado en mí y con mis propias clientas.

Es más, he podido comprobar que incluso sin tocar el tema directamente, cuando mejoras tu salud física consigues claridad mental y puedes afrontar todo esto de una forma más sencilla, menos dolorosa, más funcional.

POR FAVOR, LEE ESTO ANTES DE ESCRIBIR UN COMENTARIO, si el artículo te ha provocado algún tipo de resistencia:

Este artículo está suscitando mucha polémica, sobre todo entre las personas que no se sienten capaces de perdonar y que aún arrastran demasiada ira y rencor. Y esto no es una crítica, sino una observación sin juicio que lo único que pretende es ofrecer comprensión.

Para este tipo de personas que están viviendo su proceso de esta manera, como es normal cuando se viven situaciones dramáticas, les expreso todo mi respeto y mi cariño.

Yo también pensaba que las personas que me hacían daño no merecían ser perdonadas. Hasta que empecé mi propio proceso y me di cuenta de que estaba tirando piedras contra mi propio tejado.

A día de hoy, he comprobado por mi propio proceso y el de mis clientas, que el perdón no es hacia fuera, el perdón solo sirve hacia dentro. No hay nada, ni nadie, ahí fuera a quien tengas que perdonar. Pero esto solo se comprende cuando ya has puesto todo de tu parte para superarlo.

Hay que intentar hacer algún tipo de terapia, la que sea, que te ayude con el tema. Porque de verdad que cuando se le pone conciencia a este asunto toda la película de tu vida cambia muchísimo.

Mi recomendación, siempre, es indagar en la terapia transgeneracional. Pero cada cual que encuentre su manera a través de la psicología, la psicoterapia, o la multitud de técnicas que tenemos a nuestro alcance hoy en día.

Yo te cuento lo que a mí me ha funcionado, tú tienes que encontrar tu manera. Que en ningún caso es sentarte a criticar lo que otras personas piensan porque no piensan lo mismo que tú, como está ocurriendo con muchos de los comentarios que encontrarás debajo.

Se puede perdonar, te lo aseguro. Y es el único camino hacia la paz interior. Solo hay que dejar de enjuiciarlo, abrir un poco la mente e intentarlo.

Será un proceso lento pero realmente hermoso que muchas mujeres ya estamos transitando. Tú también puedes recorrer este camino cuando te sientes preparada. Pero si aún no es el momento, te deseo todo lo mejor y te mando todo mi amor.

GRACIAS.

Ahora sí, cuéntame:

¿Aún culpas a tu madre de muchas cosas?

¿No tienes claro que tu madre sea una madre genial y no consigues perdonarla?

¡Entre todas nos ayudamos muchísimo, no dudes en comentar!

Un súper abrazo 

P.D: No se publicará ningún comentario donde se me falte el respeto a mí o a cualquier otra persona. Esto es un lugar para el diálogo respetuoso, no para la intransigencia.

P.D2: Una de las mejores cosas que mi madre hizo por mí fue enseñarme la importancia de comer bien y hacer deporte. Gracias a eso hoy soy lo que soy y puedo ayudar a otras mujeres a tener un peso sano y una energía para comerse el mundo. Pero además, gracias a ella he tenido que hacer mucha terapia y he aprendido infinito. Solo te cuento mi proceso. Si te sirve, genial! Sino, no pasa absolutamente nada y tienes que seguir tu camino.

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: como superar problemas con mi madre, el papel de la madre, madre tímida como influye, mi madre destruye mi autoestima, minimalismo existencial, minimalismo para los traumas infantiles, minimalismo para sanar la autoestima, minimalismo y relaciones personales, traumas infantiles

¿TE SIENTES COMO LA ÚLTIMA MIERDA? APRENDE A QUERERTE Y VALORARTE DESDE HOY MISMO

20 marzo, 2017 por taniacarrasco 93 comentarios

¡Aprende a quererte y valorarte y no necesitarás nada más! Ale, fin del artículo.

Vale, voy a dar algunas explicaciones más que el tema promete 😉

Sí, tú pensabas que te querías y te valorabas pero, con el tiempo, has ido descubriendo actitudes en ti que tiran por la borda ese pensamiento.

Pero estabas tan ciega…¡tan tan tan ciega!, que eras incapaz de darte cuenta de que la mayoría de tus problemas provenían del mismo lugar: de la falta de amor por ti misma.

En RevolucionaT, donde trabajamos desde la Terapia Nutricional y el Método Pilates para que te sientas bien por dentro y por fuera, nos interesa mucho cómo esta evolución empieza en el cuerpo y se expande.

El amor por ti misma es lo que te va a dar esa paz interior que estás buscando.

Si quieres conseguir amarte de verdad, conectar con lo que necesitas y escucharte…tendrás que ir dejando atrás cualquier cosa que te esté impidiendo conseguirlo: estrés, auto exigencia, perfeccionismo, necesidad de aprobación externa, etc.

Pero, para empezar, tendrás que saber qué necesita tu cuerpo para tener energía y buen ánimo.

Basta de fingir que eres un ser superior y que no necesitas aprender a quererte! Vamos a poner las cartas sobre la mesa ya, no?

Cómo aprender a quererte más no es una tarea fácil, debería haber una asignatura de estas en la escuela. Bastante más importante es aprender a quererte que saberte los afluentes del Miño…

Pero en fin…como nadie te lo enseñó en la escuela, voy a intentar contarte yo misma todo lo que he aprendido al respecto y seguro que te sirve.

APRENDE A QUERERTE Y VALORARTE ENTENDIENDO POR QUÉ TE SIENTES ASÍ

Muchos de tus problemas pueden estar derivados, igual que me pasaba a mí, del total desconocimiento que tienes de tus necesidades. En realidad no te conoces, ¿cómo ibas a querer a una persona que no conoces?

Es muy importante que mires hacia dentro para encontrar las respuestas.

Sabes que no te gusta tu cuerpo, ni tu cara, a veces no sabes ni cómo vestir para verte bien, necesitas maquillarte a diario para sentirte más segura y, aún así, cada vez que te miras en un espejo te sacas alguna pega.

Pero nadie se da cuenta, aparentas ser súper segura y autosuficiente.

Y, aunque tienes la suerte de que ya vas viendo cómo funcionas, cuando se te pasa por la cabeza empezar a solucionar estas cosas, también te echas atrás.

¡No jodas! ¿Cómo vas a reconocer tantas miserias? ¿Tú?

Si se las cuentas a alguien ¿qué imagen estarás dando?

¡De eso nada! No estás dispuesta. ¡Con lo que te ha costado construirte esta imagen!

Aprender a quererte…¡menuda tontería!

Si la culpa es de tu madre, que te tiene frita.

¿O es de tu padre?

No, no, no…la culpa es de la escuela, de la sociedad, de Tele5, de tu hermano mayor, de la vecina del quinto, de tu tía Pepita…

Cuando en realidad no tienes la más mínima idea de por qué eres tú una de esas personas que necesitan aprender a quererse y valorarse.

¿Seguro que la culpa no es de los demás?

Pensabas que tenías una autoestima tan fuerte que no te queda más remedio que echar balones fuera. Lo que sea antes de reconocer que el problema está en ti.

SIGNOS DE QUE NO TE QUIERES TANTO COMO CREÍAS

Te cuesta mucho reconocer que tienes un problema de falta de autoestima, sobre todo delante de los demás, ¡joder con el qué dirán!, pero en soledad eres más consciente de lo que parece de tus verdaderos problemas.

Algunos signos de que no te quieres mucho, a pesar de que lo disimulas muy bien:

  • Te cuesta mirarte en el espejo desnuda
  • Te comparas con otras mujeres continuamente
  • Necesitas la aprobación de los demás para sentirte valiosa
  • No soportas las críticas
  • Tienes que ir siempre de punta en blanco y bien mona
  • Aparentas ser super segura de ti misma por miedo a que te hagan daño

DE DÓNDE VIENE LO QUE SIENTES

Quizá me estoy ensañando un poco con el papel de los padres pero es que no puedo dejar de ver en la familia la base de todo lo que va a ser la vida después. Lo bueno y lo menos bueno.

Cuando eres niña y vas creciendo, te haces una idea de lo que “eres” en función de lo que los demás, generalmente la familia, te van diciendo que eres. 

Y a eso, le añadimos el cariño y el amor que recibes, y cómo lo recibes.

Hoy en día, después de entender ciertas cosas, me duele mucho escuchar a mamás y papás diciendo cosas malas de sus hijos, con ellos delante:

“Mírale, si es que es muy malo”

“Fíjate cómo chilla, si es que es un demonio”

“Menuda me ha liado la niña mal educada esta…”

“Eres muy mala, ¡te voy a castigar!”, etc, etc, etc.

No soy madre, ni sé si llegaré a serlo, pero se me hace un nudo en el estómago cuando presencio estos comportamientos.

Si una niña o un niño crece con la idea de que es mal@, mal educad@, tont@…, esta personita se lo cree y actúa en función de lo que se espera de ella. 

Y a ti te ha pasado lo mismo y aún no has superado del todo esos traumas infantiles.

El recuerdo que tengo yo a cerca de esto es escuchar a mi padre llamándome “tonta” hasta la saciedad y sentir que todo el mundo se metía con mi físico.

No digo que esta fuese la realidad, sólo digo que así lo viví yo y así obtuve luego los resultados que obtuve. 

Si eres bajita, alta, gorda, fea…todo son comentarios subjetivos de otras personas.

Pero si en casa te enseñan que vales mucho, si en casa empiezan a consolidarse las bases de tu autoestima, si en casa te enseñan a aprender a quererte a pesar de lo que digan los demás, gran parte del camino ya está hecho.

Si en casa te valoran y animan por todo lo que eres, la película cambia muchísimo.

Pero si en casa te ponen verde y al llegar al colegio es más de lo mismo, ¿cómo queremos que crezca esa personita?

Esa personita crece pensando que no vale para nada y que nadie la quiere.

YO TAMBIÉN ME CREÍ LO QUE DECÍAN DE MÍ

Yo también me creía lo que me decían e intentaba taparlo, pero es inevitable que en el intento te desprecies y te cuestiones.

Con decirte a ti misma: «Aprende a quererte y valorarte», no sirve para solucionarlo.

No puedes aprender a quererte cuando tú misma piensas que no lo mereces. 

Desde muy enana, ha parecido que tenía una autoestima alta, una gran opinión de mi misma y las herramientas necesarias para que esto no fuese un problema para mí.

El tiempo ha sacado a la luz la verdad, como está pasando contigo, y mi máscara de Superwoman se derritió. 

A pesar de eso, no sé cómo ni en qué momento, conseguí convencer a todo el mundo de que Tania era lista y estaba encantada de conocerse.

Incluso daba la impresión de ser alguien prepotente y engreída, como muchas veces se me ha echado en cara.

Y ahora tiene sentido, intentaba aparentar esas cualidades para que nadie viese aquellas que yo creía que tenía en realidad

Aunque, efectivamente, me considero una persona bastante tonta (en el sentido de que me cuesta aprender las cosas, y cuando las aprendo es con mucho esfuerzo), me dejaba la piel en el cole para que no se notase.

Estudiaba muchísimo y cuando algo no se me daba bien, tomaba clases aunque no me gustase, para que nadie percibiese lo tonta que era.

Nadie me obligaba a tomar esas clases, esas ganas de tapar mis limitaciones siempre salieron de mi misma. 

En el mismo orden de cosas, la imagen exterior me preocupaba muchísimo. Cuidaba mucho lo que me ponía y cómo me lo ponía, aunque cuando miro las fotos me quedan dudas sobre mis intenciones. ¡Menudas pintas!

Con 12 años, ya me empeñaba en llevar tacones. No sólo era rechoncha sino bajita. Un taponcete, vamos.

Unido a esto que te cuento, me recuerdo haciendo “dietas” desde muy pequeña. Por aquel entonces mis padres se cuidaban mucho y como todo el mundo se metía con mis lorcitas, hacía un esfuerzo por incluir en mi alimentación los productos dietéticos que se me iban ocurriendo.

Imagínate la idea que tendría yo en aquel entonces sobre lo que era una dieta saludable. Absolutamente ninguna.

Crecí pensando que era tonta, inútil y gordita. Y así pasaron los años. 

Supongo que me di cuenta de que siendo tonta, inútil y gordita, no podía llegar muy lejos, así que me fui construyendo un montón de caretas para que no se viese lo que había detrás.

Tania se puso una careta de inteligente, otra de madura, otra de educada, otra de fuerte, otra de valiente, otra de segura de sí misma…y a ver quién sostenía tanta careta…

DÉJATE DE EXCUSAS

Pero ya está bien de quejarse, ¿no?

Da igual si es la baja autoestima o lo puñetera que es tu vecina del quinto, lo importante es que dejes de ponerte excusas. Lo que pasa realmente es que no te atreves a hacerte cargo del dolor que va a suponer la curación.

No quieres ahondar demasiado a ver si vas a tener que empezar a hacer cambios. 

Si en realidad no es para tanto, tampoco estás tan mal así.

Eso es lo que te dices.

Pero en el fondo, en la intimidad, hablando contigo misma, te castigas por ser tan cobarde.

Te conozco perfectamente, tenemos muchas cosas en común.

Vas a tener que aprender a quererte, te pongas como te pongas. Y créeme que será lo mejor que te haya pasado en la vida.

¿QUÉ PUEDES HACER AHORA PARA MEJORAR LA SITUACIÓN?

Ese tiempo ya pasó. Ya has descubierto que no te tienes mucho aprecio y que esa falta de autoestima te está alejando de la felicidad.

Ya te has cagado en tus padres, en tus profes y en tus compis de clase. Dejas el pasado donde está y pones el foco en lo que puedes hacer ahora para mejorar esa situación, ¿de acuerdo?

Si las bases de tu autoestima no se han consolidado ya, vas a tener que aprender a quererte por tu cuenta. Es lo que hay.

Pero si quieres que el proceso sea fácil y te gustaría empezar por transformar la forma en la que comes y te mueves, consúltame aquí. 

¡Aprende a quererte y valorarte hoy mismo! ¿Por qué esperar?

APRENDE A QUERERTE Y VALORARTE IGUAL QUE LO HE HECHO YO

La falta de autoestima trae consigo la mayoría de los problemas que vamos desarrollando cuando se conforma nuestra personalidad.

Como bien dice la palabreja: auto-estima, es la valoración que tenemos de nosotras mismas.

De este modo, cuando nos convertimos en personas adultas, la falta de amor por nosotras mismas provoca que no seamos capaces de alcanzar la felicidad. 

Nos ponemos máscaras, actuamos con incoherencia, nos auto-castigamos, y así nos vamos destruyendo.

Darme cuenta de mi falta de autoestima ha sido quizá uno de los descubrimientos más difíciles de mi vida porque, con ello, había que tratar demasiadas cosas por las que no tenía claro si quería pasar.

¡Cómo ha cambiado el asunto!

Puedes hacer muchas cosas para trabajar tu autoestima…pero aquí sólo te explico las que me han servido a mi, ¿vale?

De nuevo no podemos encontrar fuera lo que no tenemos dentro. De nuevo no podemos formarnos una imagen de nosotras mismas basada únicamente en lo que los demás han dicho, o dicen, de lo que somos.

Tendrás que cambiar tus creencias, pensamientos y sentimientos, así como adquirir ciertos hábitos que te ayuden a conseguirlo.

Tu autoestima se refleja en todos los aspectos de tu vida, desde tu trabajo hasta la forma en la que te alimentas.

Comenzamos por aquí.

Para aprender a quererte:

1. CONÓCETE MEJOR

Imagina que acabas de hacer una nueva amiga. Sí, ya tienes mogollón, lo sé, ¡pues otra!

Cuando conoces a alguien nuevo, lo normal es que surjan preguntas sobres sus gustos, preferencias, sentimientos…¿Qué comida le gusta? ¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre? ¿Qué cosas le producen alegría? ¿Cuáles son sus sueños?

Bien, pues acabas de conocer a una nueva amiga: TÚ.

Papel y boli para anotar todas las preguntas que quieres hacerle a tu nueva amiga, con sus respuestas incluidas.

Cuanto más te conozcas más cariño te tendrás.

2. NUNCA TE COMPARES

Jamás, prohibido, ni se te ocurra, no sirve para nada bueno.

Hasta que lo de aprender a quererte ya no sea tu asignatura pendiente, compararte con las demás sólo te traerá disgustos.

Te vas a fijar en las que son más inteligentes, más guapas, más macizas…Y lo normal es que en esa competición, pierdas. Y pierdes porque la batalla está perdida desde antes de empezar.

El día que te quieras, no sentirás la necesidad de compararte con nadie y ¡ganarás!

¿Acaso se te ocurre ir por la calle comparando a una «amiga» con las amigas de los demás?

No vas por la vida diciéndole a tu amiga:

«Mira Pepa, esa tiene los ojos más bonitos que tú…A lo mejor si te hicieras una liposucción te parecerías a mi vecina Antonia que está tan estupenda. ¿Por qué no te apuntas al gimnasio a ver si pierdes esa barriga, igual que hace Juana?»

No se te ocurriría jamás hablarle así a una amiga, ¿a que no?

3. ACÉPTATE COMO ERES

Sí, esta amiga tuya es muy gilipollas a veces, pero lo sabes y lo aceptas con amor.

Sabes que tu nueva amiga tiene defectos, como todo el mundo. Pero te ha caído tan bien, tenéis tantas cosas en común, que no se los tienes en cuenta. Pesan más sus virtudes.

Se va a equivocar de vez en cuando, eso seguro, pero da igual, allí estarás tú para consolarla y animarla cada vez que se sienta mal por algo que ha hecho.

4. CUIDA DE TUS NECESIDADES

¿Qué haces cuando una amiga necesita algo de ti? 

Corres para proporcionárselo. Cualquier cosa que tú puedas hacer para ayudar a una amiga, lo haces sin pensarlo.

Pues eso es exactamente lo mismo que tienes que hacer contigo. Cada vez que algo no marche bien, párate a ver qué necesitas para que eso marche mejor y hazte ese regalo.

Primero hazte consciente de todo lo que necesitas y luego, compórtate igual que lo harías con una amiga a la que aprecias muchísimo.

5. TRÁTATE LO MEJOR POSIBLE

Tienes que tratarte bien si quieres aprender a quererte. Aunque sea forzado, aunque te parezca absurdo.

¿Me tratarías a mi como te tratas a ti? ¿Me dirías a mi las cosas feas que te dices a ti misma cuando te equivocas? ¿Qué harías si yo te plantease a ti estos problemas que tienes tú? ¿Cómo te comportarías conmigo? ¿Qué me dirías?

Tratarías de solucionarme la vida, ¡está clarísimo!

TÚ ERES TU MEJOR AMIGA

Todo lo que te he explicado más arriba responde a la “técnica de la mejor amiga”.

Cómo cambia el cuento cuando lo que nos pasa a nosotras le pasa a una de nuestras mejores amigas.

Nos volvemos comprensivas, tolerantes, cariñosas, llenas de palabras de aliento…

Cuando una de nuestras mejores amigas se siente mal por algo, se insulta en tu presencia, llora, se siente la última mierda…nos falta tiempo para ir a salvarla y darle mil consejos.

¡Eso es exactamente lo que tienes que hacer contigo misma!

Dile a tu amiga, a ti misma: «Aprende a quererte y valorarte cariño, eso te salvará».

Tienes que aprender a quererte igual que te quieren tus amigas, y de la misma forma que las quieres tú a ellas. 

Para, para, para…

He dado por hecho que tienes amig@s. Podrías ser una especie rara y sentir que no las tienes. En ese caso, ¡te las inventas!

O mejor aún, ya no necesitas inventarte amig@s porque acabas de conocer a tu amiga del alma 😉

CONCLUSIONES

Si no te aprecias y no te quieres, no puedes ser feliz. Punto.

Quieres seguir escondiéndote detrás de tus miedos o quieres vivir la vida a tu manera?

Quieres seguir fingiendo que no pasa nada, que tú puedes con todo?

Me parece que no.

En tu interior sabes que eres muuuuy grande, muuuuuy valiosa, solo tienes que sacar todo eso a la luz.

Esta sería una buena manera. 

El camino no ha hecho más que empezar. No vale con leer un artículo para que te cambie la vida. Tendrás que hacer algo por ti, nadie más va a poder hacerlo.

Ánimo, acabas de conocer a una amiga incondicional, que siempre te va a ayudar, que siempre te va a decir lo que necesitas oír, que siempre te va a cuidar, hasta el último día de tu vida.

Si vais a estar tanto tiempo juntas, merece la pena cuidaos mutuamente, ¿no?

¿Serás capaz de convertirte en tu mejor amiga?

¡Te espero en los comentarios!

Abrazo enorme

P.D: Si sientes que ya no puedes seguir así más tiempo, pero no sabes qué camino elegir, solicita aquí una sesión de valoración gratuita y lo estudiamos juntas. 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: aprende a quererte y respetarte, aprender a quererte, autoestima, claves para trabajar la autoestima, coaching para la autoestima femenina, como aprender a quererte mas, como hacer crecer tu autoestima, como trabajar la autoestima, cuídarte, eres tu mejor amiga, minimalismo, minimalismo existencial, quiérete, trabajar la autoestima, traumas infantiles

  • Ir a la página 1
  • Ir a la página 2
  • Ir a la página siguiente »

Barra lateral principal

Copyright © 2023 · Genesis Sample en Genesis Framework · WordPress · Acceder

Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros para recopilar información estadística sobre su navegación y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias, generada a partir de sus pautas de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Acepto Leer Más
Política de cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR