• Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
logo-final
  • Inicio
  • Sobre mí
  • Servicios
  • Regalo
  • BLOG
    • ALIMENTACIÓN Y EJERCICIO
    • DESARROLLO PERSONAL
    • MIS VIAJES
  • Equipo
  • Contacto

mejorar la autoestima

SEGUIR LAS SEÑALES DE LA VIDA, PARTE 3: CONOCIÉNDOME Y ENAMORÁNDOME

25 febrero, 2018 por taniacarrasco 4 comentarios

Cuando la vida te da limones:

  • O te los comes sin pelar y te atragantas
  • O haces limonada

Pero los limones que te da la vida no se pueden devolver. Son tuyos. Ahí se quedan. ¡Tú verás lo que haces con ellos!

  • Después de cambiar toda mi vida por amor, como puedes leer en la parte 1
  • Y pegarme la ostia del siglo, como puedes leer en la parte 2

Mi vida siguió porque el suicidio no es algo que haya contemplado nunca, ¡y mucho menos por un hombre! 😉

¡Por favor!

Pero no te puedo decir que lo pasé bien porque no lo pasé nada bien.

Hacía justo 3 años que había dejado toda mi vida para perseguir el amor.

Hacía menos de dos años que me había casado con el que creía que era el hombre de mi vida.

Y en tan poco tiempo mi cuento de hadas se había ido a tomar por culo.

¿Qué había pasado?

Mi marido me estaba dejando, pidiéndome el divorcio y la nulidad automáticamente, cuando ni siquiera me había dado tiempo a digerirlo.

Y ahí estaba yo, bloqueada, firmando papeles y buscando piso nuevo. Totalmente en trance y aún enamorada.

 

 

 

 

Un mes crucial

Pasó un mes desde que me tuve que ir de «nuestra» casa, y vagabundear por casas de amigas mientras buscaba piso.

Mi madre, que enseguida se vino conmigo para apoyarme, vagabundeando conmigo.

¡Qué habría hecho sin Juani y sin Vanesa en esos momentos…! Gracias amigas.

Por fin, una de mis alumnas, que inmediatamente se convirtió en amiga también, me encontró piso y fuimos a verlo.

Ya había visto unos cuantos, a cuál más horrible, y estaba deseando encontrar algo en condiciones para poder empezar mi nueva vida.

Fuimos a ver el piso de noche y la única luz que pudimos utilizar fue la del móvil, pero a mí me encantó.

¡Tenía tantas ganas de encontrar un sitio para instalarme y poder empezar de cero…!

Varios días después, cuando mi madre y mi hermana fueron a verlo mientras yo estaba en el trabajo, la cosa cambió.

«Hija mía, tú has visto bien el piso, ¿estás segura de que te quieres meter a vivir aquí ya?»

Con la luz del día el piso era otra cosa: estaba terriblemente sucio, con las paredes llenas de agujeros y los baños hechos un desastre.

Lo normal en un piso donde no vive nadie.

Así que nada, ese mismo fin de semana, allí tenías a mi padre, a todos mis tíos y tías además del pintor, junto con mi madre que siempre me acompaña, para arreglar el piso cuanto antes.

¡Eso sí que es una familia! ¡Qué orgullosa me sentí de tenerlos a todos allí a mi ladito!

El casero también se portó muy bien y se dio bastante prisa para amueblarlo.

¡En pocos días tendría mi piso listo para entrar a vivir!

Aún así, seguía muy bloqueada, fría, ausente. Fui a trabajar todos los días pero mi bloqueo se alternaba con momentos de gran ansiedad.

Lo normal, supongo.

 

La gota que colma el vaso

Cuando mi familia consiguió dejarme el piso totalmente arreglado para vivir, se marcharon.

Mi madre quería quedarse un poco más pero insistí para que se fuese. ¡Te quiero mami!

Pero yo sentía que hasta que no me dejasen sola no iba a poder superarlo. 

Comía mal, dormía mal…

Sin embargo, mi ritmo de trabajo era el mismo de siempre.

Un par de días después de marcharse mi familia, el día que justo hacía un mes de mi divorcio, me levanté para ir a trabajar como cada mañana.

Estoy en otra cama, en otra habitación, en otro piso, pero mi alma no está allí.

Voy a la cocina y hago el mismo ritual que llevaba haciendo todo el mes: café y cigarro antes de ir a trabajar, sin más.

A los pocos minutos, despierto en el suelo de la cocina. 

Me había desmayado y necesitaba ayuda.

Como el teléfono estaba ahí a mi lado porque debía llevarlo encima, llamé a mi gran amiga Puri, que es enfermera, y en un momento vinieron a recogerme para llevarme al hospital.

Ese día, mientras Puri, Juani y toda la persona que se acercaba, intentaban animarme, se me acabaron las fuerzas del todo. Rompí a llorar y me saqué de dentro un poquito de ese dolor que venía arrastrando desde hacía un mes.

Ese día cambió todo.

Ese día me dije a mí misma: «¡Ya está bien!».

Y ese fue el único día que tuve que cerrar el negocio para descansar un poco. Pero a partir de aquel día, nada sería igual.

 

 

Solo hay un camino y es hacia delante

A las pocas horas de salir del hospital, mis padres ya estaban en la puerta de mi piso de nuevo.

Los pobres, que se acababan de ir, tuvieron que volver otra vez, muy preocupados.

Cuando pasa algo que para ti suponga un trauma, como puede ser un divorcio, venirse abajo es lo más normal del mundo.

Igual de normal que las personas que te quieren intenten estar a tu lado. ¡Deja que estén a tu lado!

Mis padres actuaron con tanto amor que solo su cariño ya me hacía sentir mejor.

En aquellos momentos, la coraza que me puse fue tan grande que no me permití sacar a flote mis sentimientos.

¡Por eso acabé en el hospital!

Es sano llorar, dejar salir la tristeza, incluso tomarse unos días de descanso.

Aunque definitivamente para mí, el trabajo fue la mejor de las terapias.

Pero por muy sano que sea dejar salir las emociones y permanecer un tiempo en ese estado de sufrimiento, si permaneces en cualquier emoción demasiado tiempo te puede hacer daño.

 

Sobre todo si hablamos de las emociones que consideramos «negativas» como el miedo, la tristeza, la angustia, la ira…

Justo todo eso que se siente cuando alguien te deja y tú sigues enamorada.

Yo me comí las emociones y seguí hacia delante, hasta ese día que acabé en el hospital y tuve que replantearme la situación.

Yo preferí no ahondar en mis emociones, antes que permanecer demasiado tiempo en ellas.

Pero lo que recomiendo sin duda es el término medio.

No se trata tampoco de tragárselo todo porque al final saldrá de la forma en que menos te guste.

¡Yo acabé en el hospital!

Se trata de aceptar la situación, aceptar las emociones, aceptar el cambio e ir superándolo poco a poco sin que te cueste la salud.

Lo de ser una super woman ya no va conmigo.

 

 

¿Y dónde están aquí las señales?

Pues si te soy sincera, no recuerdo más señal que la ostia que debí pegarme contra el suelo el día que me desmayé.

¿No te parece señal suficiente? 😉

Otra señal que recuerdo es que los muebles de la cocina de mi piso, que eran los únicos muebles que había cuando fuimos a verlo sin luz, eran naranjas.

El naranja es uno de mis colores favoritos, fetiche, me encanta. ¡Eso tenía que significar algo! 😉

¿Cuántas cocinas naranjas has visto en tu vida? Yo hasta ese momento ninguna.

Las señales no fueron demasiado evidentes, pero a partir del día del hospital mi actitud cambió muchísimo.

  • Empecé a tomarme más en serio mi alimentación
  • Entendí que tenía que descansar más
  • Empecé a llorar y a desahogarme cuando me apetecía
  • Empecé a decir lo que pensaba y a expresar lo que sentía

¡Qué mejor señal que mi propia actitud!

También empecé a salir con amigos a bailar, a divertirme, a hacer todas las cosas que tanto me gustaba hacer antes.

Ahora sí que era una super woman:

  • Viviendo sola en un piso precioso
  • Con mi negocio propio
  • Ganando bastante dinero
  • Y cada día más tranquila y feliz conmigo misma

 

Conociéndome y enamorándome de mí misma

Cuando te vas a vivir sola después de un duelo como este, empiezas a descubrir cosas que no sabías sobre ti misma.

Me di cuenta de que mi autoestima estaba tan dañada que había suplicado para que mi matrimonio no se rompiese.

Incluso había accedido a comportarme de una forma que yo no era, para contentar a mi ex marido.

Ahora, la Tania que resurgía de las cenizas, iba a cambiar muchas cosas.

Quería conocerme más, aprender a manifestar mis emociones mucho mejor, enamorarme de lo que ya era, aceptarme en todas mis facetas. 

Poco a poco iría aprendiendo herramientas nuevas, pero ahora mismo lo que necesitaba era mimarme más que nunca.

Seguí haciendo terapia y poco a poco iba viendo más y más luz. 

Cada día me sentía más fuerte, más capaz, más agradecida.

¡Para eso tenía que quedarme allí!

Porque la etapa que empezaba a continuación sería una de las épocas más felices de mi vida. 

Ahora entendía por qué la vida me había puesto en esa situación.

¿Por qué me había hecho dejarlo todo para perseguir un amor que no triunfaría?

Por muchos motivos:

  • Había podido cumplir el sueño de tener mi propio negocio
  • Había aguantado el chaparrón en lugar de salir huyendo
  • Había conseguido salir adelante muy reforzada

¡Estaba aprendiendo muchísimas cosas que no podría haber aprendido de otra manera!

Por eso siempre digo que todo lo que pasa en la vida sucede por algo, todo nos lleva a un lugar mejor, de todo se aprende y estamos donde tenemos que estar en cada momento en favor de nuestra evolución.

 

 

Una super woman diferente

Sí, el traje de super woman me ayudó en muchos momentos y tengo que estarle muy agradecida. Pero hasta que no te quitas ese traje no disfrutas plenamente de la vida. 

El traje es bonito, además, a la gente le gusta, pero no te lleva donde quieres estar.

Saltar obstáculos e intentar correr más rápido, te desgasta por completo.

  • Pero si coges el obstáculo,
  • aprendes a trascenderlo,
  • paras un poco el ritmo para descansar antes de seguir
  • y continúas cuando estés preparada a un ritmo en el que estés cómoda

¡La vida se disfruta, se saborea, te ofrece todo su potencial!

Ponerse una venda en los ojos y hacer como que no pasa nada, no es el camino.

Si estás pasando por una situación que te disgusta, lo mejor que puedes hacer por ti es:

  • Aprender a utilizar tu tiempo para encontrarte mejor
  • Conocerte más
  • Y mimarte por encima de todas las cosas

¡Eso es justo lo que hice yo!

Me centré en mí misma:

  • Asistía a todo tipo de cursos y seminarios
  • Conocía gente nueva
  • Pasaba tiempo de calidad conmigo misma

Y todo eso me salvó la vida en aquellos momentos tan difíciles.

 

 

¿Quieres quitarte el traje de super woman de una vez?

Puede que:

  • Hayas pasado por un suceso traumático que te esté haciendo polvo
  • O que simplemente ya no puedas más con la vida que tienes

Si te sientes en alguna de estas dos situaciones y quieres saber:

  • Cómo hacer para tener tiempo para ti
  • Cómo manejar el estrés en tu vida
  • Y cómo conocerte para poder amarte más y tener una vida más plena

¡Tienes que venir al taller presencial que haré en Málaga junto con Inma Torres, de vidaenpositivo.org!

Las suscriptoras de este blog tenéis una gran ventaja…pinchando en el enlace morado lo verás 😉

AQUÍ TIENES TODA LA INFORMACIÓN, pero puedes escribirme con cualquier duda, ¿vale?

 

 

Conclusiones

Hasta que no cogí las riendas de mi vida, dejé salir mis emociones y empecé a hacer cosas para mí misma, no levanté cabeza.

Entendí que la prioridad era yo y que así tendría que ser siempre, si quería estar al 100% para las personas que me rodeaban.

Mi trabajo requería mucha atención, las personas que asistían a mis clases se merecían lo mejor de mí y tenía que sentirme bien para poder ayudarles a ellas.

Mi familia se merecía que me recuperase cuanto antes, porque era la mejor manera de agradecer todo lo que habían hecho por mí.

Las amigas que me acompañaron en todo momento, se merecían mis sonrisas y verme encarrilar mi vida lo antes posible.

Y yo me merecía todo lo mejor, ¡lo sentía muy dentro de mí!

  • Si vives cerca de Málaga
  • Y tú también piensas que te mereces lo mejor

¡Te esperamos en «El mito de la superwoman»!

 

Si a ti no te interesa pero conoces a alguien a quien le pueda interesar, por favor, hazle llegar esta información.

Y ahora puedes contarme lo que quieras, si así lo sientes.

¿Qué haces para superar este tipo de situaciones?

¿Sientes que te superan y que nunca terminarás de afrontarlas?

Estoy al otro lado para lo que necesites.

Un fuerte abrazo

Tania

 

 

 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: cómo encontrarme a mí misma, cómo superar las adversidades, mejorar la autoestima, quererte a ti misma, super woman

PRIMER PASO PARA MEJORAR LA AUTOESTIMA DESDE YA

25 septiembre, 2017 por taniacarrasco 10 comentarios

En RevolucionaT te voy a hablar mucho de cómo mejorar la autoestima porque me parece la base fundamental de todo lo que no va bien en tu vida. 

Ahora mismo, la forma más rápida en la que te puedo ayudar a conseguirlo es la Terapia Nutricional, puedes consultarme aquí. 

Cuando hablo de tu vida, también me estoy refiriendo a todo lo que no iba bien en la mía.

Quiero que dejes de fingir que no pasa nada, que dejes de hacerte la fuerte, que sepas que no estás sola en este camino de auto conocimiento, y que pase lo que pase sepas que conseguirás mejorar la autoestima para arreglar otros muchos aspectos de tu vida que no están funcionando.

¿Quieres enamorarte de ti misma de verdad?

Sé que es una pregunta trillada, repetida y aburrida, pero expresa claramente lo que tienes que hacer:

Aprender a dejar de fingir para quererte como eres.

¿Nos vamos?

POR QUÉ SIENTES RECHAZO CUANDO ESCUCHAS ALGO SOBRE MEJORAR LA AUTOESTIMA

Es posible que hayas crecido haciéndoles creer a los demás que eres una persona segura y auto suficiente, independiente, emocionalmente sana y con una seguridad en ti misma a veces abrumadora.

Lo que nadie sabe, ni siquiera tú, es que detrás de esa coraza de Superwoman se esconde una mujer llena de complejos que aún no se ha dado cuenta.

Hay un paso fundamental que tienes que dar antes de intentar mejorar la autoestima, o la imagen que tienes de ti misma, y fue lo que a mi me hizo cambiar el chip y empezar a hacer los cambios necesarios para volver a enamorarme de la persona que soy.

¿Te has parado a a pensar por qué sientes rechazo cada vez que escuchas algo relacionado con mejorar la autoestima?

Cuando algo escuece es que hay herida, del mismo modo que cuando algo nos es indiferente es que no nos supone ningún problema.

Si sientes rechazo cuando escuchas algo sobre mejorar la autoestima es que dentro de ti se genera inquietud, inseguridad, algo se tambalea.

POR QUÉ SIENTES QUE ALGO NO VA BIEN A PESAR DE CREERTE CON UNA BUENA AUTOESTIMA

A menudo te preguntas:

«¿Qué pasa con mi vida?, ¿por qué siento que algo no va bien cuando en realidad lo tengo todo?»

«¿Por qué me siento triste y angustiada?»

«¿Por qué me molesta tanto lo que han dicho de mí si yo sé que no soy así?«

Crees que no tienes problemas de autoestima, que por tanto no necesitas mejorar la autoestima, pero sientes que algo está fallando y no sabes qué es.

Yo me he sentido de esta manera muchos años.

Estaba trabajando en mí, tenía una profesión que me hacía muy feliz, mi familia estaba sana, mi pareja era un amor, tenía buenas amistades…¿a qué se debía ese vacío que sentía?

Ahora lo sé: el vacío era interno, no tenía nada que ver con las cosas de mi vida «exterior».

Además, tienes que entender que hay muchos procesos químicos que se producen en tu cuerpo que también hacen que no te sientas bien contigo. Y piensas que hay algo que no va bien fuera cuando podría solucionarse simplemente comiendo mejor. 

SABES HACER TAN BIEN TU PAPEL QUE YA NO LO DIFERENCIAS DE LA REALIDAD

El problema es el siguiente: te has creído tanto tu personaje, esa imagen de mujer arrolladora que a todo el mundo le gusta, que eres incapaz de ver la realidad porque tienes miedo.

«¡Tú no necesitas mejorar la autoestima!», repites en tu mente cuando lees algún artículo parecido a este.

La persona que eres, o que los demás dicen que eres, es tan segura y estupenda que no tiene nada que hacerse mirar.

Lo que los demás no saben, porque ya te encargas tú de esconderlo bien, es que tienes un miedo que te cagas.

Pero «sssshhhh», que nadie se entere.

¿SEGURO QUE NO NECESITAS MEJORAR LA AUTOESTIMA?

Si no necesitas mejorar la autoestima ¿por qué sigues leyendo esto?

Todo lo que tenga que ver con mejorar la autoestima te rechina y sientes rechazo, sin embargo, tienes miedo a reconocer que:

  • Cuidas tanto tu imagen porque odias tu cuerpo.
  • Te arreglas para gustarle a los demás.
  • Te preocupa lo que la gente piense de ti.
  • Tu intolerancia al rechazo es enorme y por eso intentas agradar a todo el mundo.
  • El personaje que te has creado te resulta muy molesto, pero como a los demás les gusta no te atreves a ser tú misma.
  • Te niegas a reconocer que necesitas mejorar la autoestima porque eso supondría sentirte fracasada.
  • Te niegas a reconocer que tienes complejos porque eso sería aceptar tu vulnerabilidad.
  • Eres incapaz de mirarte desnuda delante del espejo y admirar lo que ves.
  • Siempre estás intentando cambiar algo de ti misma.
  • Te comparas con todo el mundo y en muchas ocasiones sales perdiendo.
  • A veces no entiendes qué es lo que a la gente le gusta de ti.

Si estas cosas a ti no te pasan, me he equivocado contigo, puedes marcharte 😉

CUANDO NO SABES QUE HAY UN PROBLEMA NO LO PUEDES SOLUCIONAR

Hace años, alguien podría haber escrito este artículo para mí y aún habiendo seguido leyendo hasta el final habría terminado rechazando su contenido.

Habría pensado: «¿Quién se ha creído esta tía para hablarme así?, ¿qué sabrá ella de mis problemas?»

O quizá habría pensado:

«Pues está muy bien esto que cuenta esta chica pero a mí no me pasa. Voy a enviarle el artículo a mi amiga X que seguro que a ella le viene genial». 

Incluso cuando padecía bulimia no lo achacaba en ningún caso a la falta de amor propio así que ¿cómo iba a querer mejorar la autoestima si de eso iba bien servida?

De la bulimia tenían la culpa mis padres, mi pareja, la sociedad de consumo…Mi autoestima esta perfecta.

Tenía tantísimo orgullo que me era imposible darme cuenta de mis debilidades, me negaba a verlas, eso era para mí caer muy bajo. Pero era un orgullo inconsciente, tampoco sabía que lo tenía ahí dando por saco todo el tiempo.

EL PRIMER PASO QUE TIENES QUE DAR SI QUIERES MEJORAR LA AUTOESTIMA

Sí, sólo hay uno. Sólo hay un primer paso que, cuando lo das, todo empieza a cambiar y a verse de otra manera.

Te puede parecer una tontería, pero te aseguro que marcará un antes y un después en tu búsqueda de eso que falla.

Este primer paso fundamental para mejorar la autoestima es LA ACEPTACIÓN. 

Pero cuidado, la aceptación no significa «conformismo» o tener que pasar por alto todo lo que te ocurra.

Aceptación implica reconocer lo que pasa para que, desde esa aceptación, se puedan producir cambios si así lo deseas.

Si no puedes reconocer que la mayoría de tus problemas vienen de que no te quieres ni te respetas lo suficiente, no vas a poder cambiar nada, al contrario.

Si no reconoces este punto la cosa cada vez irá a peor, porque si tú no eres la responsable de lo que te pasa buscarás otros culpables y te seguirás contando mentiras como estas:

  • Yo me arreglo para gustarme a mí misma.
  • No me importa lo que digan los demás, lo hago porque yo quiero.
  • La culpa de esa discusión es de él que me trata mal.
  • No necesito a nadie porque yo me basto y me sobro conmigo misma.

Cuando en realidad eres una persona bastante dependiente, que tiene muy en cuenta los juicios de los demás, y a la que le encantaría vestirse de forma más cómoda y no tener que reventarse los pies con los tacones, o destrozarse la piel con tanto maquillaje.

NO ERES PERFECTA, Y NO PASA NADA

Cuanto antes te atrevas a reconocer que nunca serás perfecta, más aliviada te sentirás.

Aceptar tus limitaciones, tus miedos, tus heridas, es la forma más efectiva de conseguir tomar cartas en el asunto para poder mejorar la autoestima.

Te aseguro que cuando aceptes que eres vulnerable, que hay cosas que te afectan mucho y que no pasa nada por ello, empezarás a verte de otra manera.

No eres una víctima de tu vida, eres la responsable absoluta de que las cosas puedan ir a mejor. Lo que no significa que tengas que castigarte porque no eres como te gustaría o no tienes todo lo que quieres. Nada de castigos por favor.

Reconocer tus debilidades te enseña a respetarte como eres, y el respeto por ti misma será lo que te llevará lejos.

CONCLUSIONES

Tardé muchos años en darme cuenta de que lo único que me pasaba es que no conseguía aceptarme tal y como era.

Era incapaz de verbalizar lo que me pasaba porque no quería reconocerme débil, insegura, sensible.

Han sido muchas las terapias, las formaciones, los problemas, los aprendizajes, que me han llevado a darme cuenta que lo único que tenía que hacer era aceptar la realidad.

Una vez que conseguí aceptar la realidad, fui capaz de mejorar la autoestima, que tanta falta me hacía, y empezar a hacer los cambios que necesitaba para tener una vida más plena y gratificante.

Sé que a ti te pasa lo mismo, que te cuesta mucho aceptarte, que lo de mejorar la autoestima no ves que sea la solución a tus problemas, pero no te preocupes, cada una tiene su camino.

Si has llegado hasta aquí es porque algo de sentido tiene todo esto para ti, así que cuando estés preparada para aceptarlo te estaré esperando con todo mi amor. 

Me encantaría que compartieras este artículo si crees que juntas podemos ayudar a alguien más, y también que me comentases tus impresiones.

¿Crees que sería bueno para ti mejorar la autoestima?

¿Hasta dónde crees que la aceptación de la realidad puede conseguir mejorar tu vida?

A mí, sin duda, lo que más me ha ayudado, es sentirme bien con mi físico. Desde el enfoque del amor propio y no de la imagen exterior. Si quieres empezar por ahí, escríbeme aquí y comenzamos. 

Un abrazo grandísimo

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: aprender a mejorar tu autoestima, cómo mejorar la autoestima, cómo puedo mejorar mi autoestima, mejorar la autoestima, técnicas para mejorar la autoestima

Barra lateral principal

Copyright © 2022 · Genesis Sample en Genesis Framework · WordPress · Acceder

Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros para recopilar información estadística sobre su navegación y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias, generada a partir de sus pautas de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Acepto Leer Más
Política de cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR