• Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
logo-final
  • Inicio
  • Sobre mí
  • Servicios
  • Regalo
  • BLOG
    • ALIMENTACIÓN Y EJERCICIO
    • DESARROLLO PERSONAL
    • MIS VIAJES
  • Equipo
  • Contacto

autoestima femenina

TÚ SABIA, TÚ ABUNDANTE, TÚ LIBRE…TÚ PODEROSA

24 marzo, 2019 por taniacarrasco Deja un comentario

Llega un momento en la vida de las mujeres fuertes y eficientes, en que algo se rompe.

Esas mujeres que siempre lo han tenido todo muy claro, que parecía que se iban a comer el mundo, que han superado miles de barreras casi sin despeinarse…y de repente, como si todo hubiese cambiado de golpe, se sienten perdidas.

Llega ese momento en el que la vulnerabilidad de la que llevan huyendo toda la vida, aparece con fuerza para sacar a la luz todas las heridas.

Y en esos momento, empiezas a preguntarte:

  • ¿Qué me está pasando?
  • ¿Por qué ya no tengo la energía que solía tener?
  • ¿Por qué no he conseguido mis sueños con lo mucho que me he esforzado?
  • ¿Qué queda de esa niña que había venido a este mundo a hacer algo grande?
  • ¿Por qué lo más grande que siento en mi vida es el estrés y la ansiedad que me aplastan?

Son momentos muy duros, momentos difíciles de gestionar para una mujer que está acostumbrada a tirar hacia delante y que ahora no sabe para dónde tiene que tirar.

Si te sientes así, este artículo es para ti.

¿QUIÉN ERES?

No hace mucho que te planteas esta pregunta y no sabes contestar.

Todo aquello con lo que identificabas ya no tiene el mismo color que antes.

  • Tus relaciones no te llenan.
  • Tu aspecto físico se deteriora y eso te obsesiona.
  • El trabajo, que ha sido fuente de satisfacción tantos años, ahora te produce frustración.
  • Quiere poner orden en tu vida, pero es demasiado complicada.
  • Sientes que todo te sobra y todo te falta, al mismo tiempo.

Miras atrás y no te reconoces, ¿dónde estás y qué ha quedado de ti?

TÚ SABIA

Eras una niña lista, responsable e intuitiva.

Tenías una especial sensibilidad con las injusticias y enarbolabas cualquier bandera que tuviera que ver con los derechos de personas más necesitadas.

Ahí estabas siempre, para todo el mundo, fuerte y complaciente al mismo tiempo.

Conociendo tus cualidades, has llegado a sentirte por encima de los demás en muchas ocasiones.

Tú sabías lo que era mejor para cada persona en cada momento y se lo hacías saber. Pero, por el camino, ¿quién sabía lo que era mejor para ti?

Te considerabas una persona sabia y…ahora…¿cómo aplicar es sabiduría en llenar el vacío que sientes?

TÚ ABUNDANTE

Aunque lo más importante para ti siempre ha sido el amor, de todo lo demás también has tenido.

La salud y el dinero suelen acompañarte, algunas veces en cantidades menores de las que te gustaría pero muy superiores a la media.

Sin embargo, el amor no ha funcionado tan bien.

Montones de relaciones fracasadas que dejan heridas profundas que intentas disimular con valentía. Pero ya pesan demasiado. Aún así, te agarras a las relaciones con tus ex como si eso te devolviese la identidad perdida.

Pero no, a pesar de ello no consigues recuperar esa identidad y la sensación de no saber quién eres aún te acompaña.

Lo tienes todo, y no tienes nada al mismo tiempo. Lo sabes todo, y no sabes nada al mismo tiempo…

¿Qué se hace en estos casos?

¿Qué hace una mujer como tú, que siempre ha sabido que hacer, cuando no tiene ni idea de lo que hay que hacer ahora?

Y haces, y haces, y sigues haciendo, porque te enseñaron que cuanto más hacías, más valor tenías. Pero ahora intuyes que tu valor no te vale. Curioso juego de palabras.

TÚ LIBRE

¡Oh la libertad!

Esa imagen de mujer fuerte, independiente y libre que todo el mundo piensa que eres.

¿Dónde está esa libertad que defiendes en esos días donde la ansiedad es la mayor carcelera?

Porque sabes que naciste libre, pero hay algo que no te deja desplegar las alas y volar, tal como tú esperabas de ti misma.

Deja de tener importancia lo que los demás querían que fueses, eso está empezando a darte igual. Esas ideas de los demás te han mantenido prisionera y ahora quieres experimentar la verdadera libertad.

  • Quizá tengas que dejarlo todo para irte a viajar…
  • Quizá tengas que mandar a alguien a tomar por c… de una vez…
  • Quizá esto se resuelva haciéndote Hare Krishna…

No, tampoco te convencen esas ideas aunque en tu cabeza suenan bastante bien.

Pero hay algo más, tiene que haber algo más que una huida hacia delante.

¿Pero qué?

TÚ PODEROSA

Lo único que encuentras en esta búsqueda es la conciencia de que tienes que seguir buscando, pero más adentro.

Toda la vida obsesionada con la acción exterior, con: HACER HACER Y HACER para poder TENER Y SER.

Y como ya has leído mucho y sabes de qué va el tema, se están empezando a hacer pesadas tantas recomendaciones para que despiertes y empieces a cambiar.

Lo cierto es que no hay nada que cambiar. Quédate bien con esta idea.

Tú ya eres sabia, abundante, libre y muy poderosa. Así naciste y así morirás.

¿Qué es lo que ha pasado entonces?

Que en el camino del «hacer» te olvidaste de lo que ya eres, solo tienes que volver a recordarlo.

Eso de que «no se puede tener todo en la vida»…¡mentira!

Claro que puedes tenerlo todo. Bueno, no es que puedas, es que ya lo tienes. Simplemente olvidaste dónde lo guardaste y por eso te sientes tan perdida.

Así que buscas una guía, alguien que te resuelva los conflictos internos, que te dé algo de luz.

Incluso a veces piensas que ya lo has encontrado, hay muchas personas «gurú» en el mercado. Está genial seguir recomendaciones y ver conferencias…¿y luego qué?

Se convierten en pequeñas gotitas que van cayendo en tu océano y lo van llenando de más agua. Pero tú ya eres océano, lo único que tienes que hacer es mojarte un poco (o un mucho).

Las mujeres como tú,

  • que ya han saboreado mucho éxitos,
  • que han conseguido muchas cosas en la vida,
  • que han superado situaciones que para otras personas son grandes desgracias que nunca se superan…

Tú que eres fuerte y que ahora necesitas serlo un poquito menos.

El poder más importante que tienes es tu vulnerabilidad. Porque cuando una mujer como tú entiende que sentirse frágil y vulnerable es su mayor salvación, su poder de dispara. 

Y aunque tú ya eres poderosa, tu poder verdadero te espera aquí, dentro de ti.

Me encantan las mujeres como tú, así que me encantaría acompañarte.

Te presento mi curso «TÚ PODEROSA»,

donde las piedras que estás encontrando en tu vida actual se van a convertir en auténticos diamantes.

Quiero tenerte dentro, quiero trabajar contigo, ahora solo falta que tú también lo quieras y que juntas multipliquemos ese poder que hay en ti.

PINCHA AQUÍ PARA ACCEDER A TODOS LOS DETALLES DEL CURSO y vuelve a ser tú. 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: abundancia y exito femenino, autoestima femenina, como ser mas poderosa, conectar con la vulnerabilidad, curso de autoestima, poder femenino

NO NACÍ PARA BARBIE: Cómo superar las creencias limitantes relacionadas con tu físico

6 enero, 2019 por Rossana Becerra 19 comentarios

Ya hemos hablado de cómo superar las creencias limitantes en otras ocasiones. De hecho, hablo mucho del tema.

Pero siempre es enriquecedor escuchar lo que piensan otras personas. Y mucho más si son mujeres valientes de esas que nos dejan con la boca abierta con su elocuencia.

Por eso, y como primer artículo de este 2019, te traigo un post de una mujer especial, que prácticamente acabo de conocer.

Y, aunque como te digo, nuestra relación es muy reciente, me llega una energía por su parte que seguro que también te llega a ti. Una energía sanadora, firme, luminosa.

Te dejo con ella, Rossana Becerra, que quiere hablarte de creencias limitantes y de cómo ella consiguió superarlas en un entorno que no ayudaba demasiado. Conociendo su historia tú también podrás sanar las tuyas porque, al final, todas estamos en el mismo camino.

 

 

 

¿Sabes cuáles son tus creencias limitantes? ¿Quieres saber cómo sanarlas?

Tráelas a la consciencia, acéptalas, la luz entra por las partes rotas.

 

Hola, soy Rossana y nací y crecí en una ciudad que, entre otras muchas cosas, se hace llamar epicentro del turismo estético.

Es decir, mucha gente viene a arreglarse, ponerse o quitarse, algo de su templo sagrado, ósea de su cuerpo.

Quiero mostrarte cómo crecer en esta ciudad, marcada por el culto al dinero, un coletazo del narcotráfico de los años 80´s y 90´s, marcó el desarrollo de mi personalidad.

Permíteme compartir contigo por qué comprender esto fue la pieza clave en mi despertar de consciencia y en la reparación de mi autoestima, frente a escenarios laborales y relaciones de pareja.

Vamos, sígueme…

 

LA BASE DE UN SISTEMA DE CREENCIAS LIMITANTES: Qué fue crecer como una niña menos agraciada y favorecida en Colombia durante los 90 ́s

Nunca nadie me dijo que era literalmente menos agraciada o favorecida, pero esa fue exactamente la conclusión que me acompañó durante mi infancia y una parte importante de mi juventud.

A partir de esas creencias forjé mi personalidad, y si iba a ser fea y pobre, entonces me esforzaría por al menos ser inteligente para lograr salir de la “pobreza”. Lo otro no tenía mucho arreglo…

 

 

MIS PRIMEROS ESFUERZOS HACIA LA CONSTRUCCIÓN DE MIS CREENCIAS

 

Nací a mediados de los años 80´s en Cali, Colombia, la capital mundial de la salsa, en el seno de una familia humilde, de padres aún muy jóvenes que pronto descubrieron que no estaban hechos el uno para el otro.

Aunque a vuelo de pájaro podrías describir que mi infancia corrió de forma natural, dentro de mí creció un hoyo negro, de esos que absorben planetas y astros con luz propia.

Crecí sintiéndome menos agraciada y favorecida:

  • No me veía como las otra niñas
  • No me vestía como las otras niñas
  • No jugaba como las otras niñas
  • No vivía en casa grande como las otras niñas

Rápidamente calculé, sobre los ocho años, cómo algunos niños lograban el cariño de la profesora.

Analicé cómo “los preferidos” de la profe eran bonitos, bien vestiditos, recibían reconocimientos en eventos escolares y, de vez en cuando, llegaban con pomposos regalos enviados por los padres en reconocimiento al esfuerzo y dedicación de la maestra.

Mi familia no podía permitirse eso, ya hacía un esfuerzo descomunal por pagarme un colegio privado, lo que aún hoy es un lujo en Colombia.

¿Sabes lo que significa ser la primera que el bus escolar recoge en la mañana y ser la última que deja en las tardes? Que definitivamente eres la que más lejos vive. Esa era yo.

Durante un recorrido de dos horas recogía a más de 30 niños, y veía algunas de sus casas con vidrios polarizados, patos disecados en las entradas…Y yo quería mi propio pato disecado.

 

 

TIPS PARA DEFINIR STATUS

Por si no lo sabes, en Colombia los cumpleaños infantiles son todo un espectáculo, es como una competencia por la familia que más alto tire la casa por la ventana.

Eso quiere decir:

  • Piñata
  • Comida
  • El respectivo payaso animador
  • Rifas
  • Y regalo sorpresa al final del evento…

…Cuando los niveles de azúcar en sangre amenazan con escalar a coma diabético y los padres salen disparados excusándose por el cansancio del niño berrinche.

Durante los siete años que estuve en ese colegio campestre, fundando por prestigiosos médicos de la región, me invitaron a una sola fiesta.

Aún sigo pensando que esos tenis «Ribuk» que tanto quería tuvieron algo que ver. Poco después mis compañeros de clase me aclararon que había un error ortográfico en la impresión de la marca, era «Reebok».

De esa forma entendí que las letras impresas en mi ropa, zapatos, mochila, eran sinónimo de status, y mis compañeros tenían ojo de supervisor de control de calidad para verificar la autenticidad de la marca. Así me gané el apodo “zapato de caño”.

 

 

LAS PRIMERAS CHISPAS DE MI ESPÍRITU REBELDE

En cuarto de primaria, con nueve años, el colegio nos introducía al sistema democrático.

Así que para empezar, debíamos seleccionar a un representante del salón (de la clase). Yo me presenté, hice una campaña impecable basándome en ideas para un “salón mejor”.

Y contra todos los pronósticos, gané.

Este evento, que aún recuerdo como un gran logro en mi vida, me dio fuerza, voz, seguridad, esa sensación de “sí se puede”.

Pero pronto mi luz fue apagada en el primer intento por defender los derechos de los menos favorecidos, es decir los feitos del salón, esos tímidos que no suenan ni relampaguean.

 

Como nuestro colegio era prestigioso siempre nos invitaban a eventos, programas y concursos en televisión.

Como era de esperarse la profesora debía seleccionar a 5 niños de entre más de 40 que éramos.

¿Ya sabes a quiénes seleccionaron a través del método mejor conocido como “a dedo”?

Y con todo la profesora nos dice: “si alguien no está de acuerdo que levante la mano”.

Mientras escribo esto recuerdo como el corazón se me quería salir del pecho mientra mi mano subía, ¿de verdad esa era mi mano levantándose?

«Siempre son los mismos de siempre, no es justo»,  repliqué.

La profesora rompió en llanto en frente de salón. Mis compañeros comenzaron a gritarme egoísta, envidiosa, y tuve que ir hasta el escritorio de la profesora para pedir perdón por ese comentario sin sentido.

Así se apagó mi luz, por un tiempo.

 

 

UNA PERSONALIDAD A PUNTO DE NACER

Para hacerlo corto, a los 10 años me planté frente a mis padres y les dije: «No voy más a ese colegio, ya me encontré otro».

Lo aceptaron sin mucho drama y así la vida me dio un respiro, un volver a empezar.

Con los años, a la luz de la consciencia, comprendí que huir y volver a empezar era mi estrategia para sobrevivir.

Entiendo la adolescencia como ese momento en la existencia en el que te reconoces desde unos pensamientos y creencias, profundizas en ese relacionarte con el otro y con tu entorno, es un intercambio de información constante que validas en tu experiencia.

Y por mi entorno paseaban adolescentes con flotadores bajo el brazo…

Esto significaba que acababan de salir de una cirugía estética, liposucción para ser más exacta, el flotador era para sentarse en clase.

Las mismas chicas del flotador eran las que tenían novio con carro (de vidrios polarizados), eran populares dentro y fuera del colegio, asistían a fiestas…Todo esto me parecía importante para ser alguien en la Cali de finales de los 90´s.

¡Y yo ni salsa sabía bailar!, lo que era un requisito para sobrevivir en esta sociedad. La forma más fácil de “levantar” o conseguir novio era bailando.

Tampoco me iba a poner “un vestido bonito, de esos bien ceñiditos” como dice la Guayacán Orquesta (tienes que ver el video de esa canción para comprender al estereotipo al que me enfrentaba).

Aunque quería ser la mujer más deseada en el mundo, no contaba con las piernas largas, tonificadas y morenas, otro requisito indispensable durante la época.

Total, nunca tuve un novio caleño, ni viví el amor adolescente de las tardes caleñas.

Es probable que estuviera en el nicho equivocado para encontrar alguien a quien le resultara interesante, o sencillamente el universo consideró que esa era la experiencia que debía vivir.

 

 

CREENCIAS LIMITANTES EMPODERADAS Y HACIENDO FIESTA CON MI EXISTENCIA: Las justificaciones de mi ego

Al tiempo que forjaba mi personalidad comencé a reflejar todas mis creencias limitantes, y a reconocerlas como verdades.

Recuerdo claramente pensar:

  • “No nací para Barbie, Dios me hizo inteligente pero no bonita”.
  • “Si quiero ser alguien tengo que estudiar”
  • “Mi familia no tiene contactos, tengo que empezar desde abajo y trabajar duro para ascender”

Éstas eran muy conscientes, las reproducía mentalmente en un lenguaje comprensible, como un carrusel, pero había otras más sutiles…

  • “No soy suficiente”
  • “No me lo merezco”
  • “Lo estoy haciendo mal”
  • “Los otros son mejores”
  • “Mis productos, trabajos, presentaciones, no son buenos”
  • “Se van a reír de mí”
  • “Soy rara”
  • “No sé cómo expresarme”
  • “Soy imprudente”
  • “Mi personalidad espanta gente”

Éstos son sólo algunos ejemplos de mis creencias limitantes. ¿Y a qué trinchera me arrojaron?

 

REPETICIÓN DE PATRONES

Empecé a generar experiencias de sufrimiento.

Uso la expresión “empecé a generar” porque hoy sé, pues lo he verificado, que soy responsable de todo lo que ocurre en mi vida.

Y antes de contarte cómo resolví este enredo, déjame contarte cómo esas creencias limitantes me arrastraron hasta el fondo.

 

MIS CREENCIAS LIMITANTES Y MIS RELACIONES DE PAREJA: La falsa heroína

 

Un día me salió la tapa premiada, me enamoré y alguien se “enamoró de mí”.

Y otra tapa premiada.

Y otra tapa premiada.

Todas relaciones tóxicas en las que intercambiaba afecto por dinero, ropa, mercados, fiestas, cenas… Fui una maestra jedi en el rendimiento de un sueldo de estudiante.

También relaciones en las que me quedaba queriendo sola o en las que aceptaba compartir, justificándome como “una mente abierta y poliamorosa”.

Las personas que atraía a mi vida presentaban un abanico de conflictos y yo quería salvarlos, quería sentirme necesitaba, amada, valorada.

Así que a través del dinero generaba una especie de falsa lealtad, amarraba a mis parejas y tomaba las decisiones por los dos.

Y ese “no soy suficiente” me rondaba. “Quiéreme, quiéreme”, “acéptame, acéptame”, “no soy linda pero soy inteligente y voy a la mejor universidad de Colombia”, “no soy linda pero puedo invitarte”, “quiéreme y yo te acepto como eres”.

Soy honesta contigo cuando te digo que estos hombres se esforzaron por ser mis entrenadores espirituales.

 

 

MIS CREENCIAS LIMITANTES Y MI DESARROLLO PROFESIONAL: Incpacidad de aceptar que era capaz

Como era de esperarse, académicamente tuve una carrera maravillosa: un pre-grado y dos maestrías.

Presenté entrevistas brillantes, fui seleccionada para cargos por los que todos me admiraban.

Pero mataba el tigre y me asustaba con el cuero.

Fue como si ese evento de la primaria se repitiera una y otra vez.

Empezaba con mucha energía todos mis trabajos, pero con el tiempo mi brillo se opacaba, yo misma lo opacaba.

Recuerdo tener miedo a hablar, tuve reuniones en las que expuse mis ideas con total inseguridad y después me disculpé en público por haberlas propuesto.

Todo el tiempo me disculpaba.

Y ni hablar del cariño de los jefes…Quería que me quisieran, anhelaba su aprobación, pero nada era suficiente, había una pared invisible entre nosotros.

Y veía cómo mis colegas lograban esa empatía con estos personajes, y yo del otro lado de mesa, invisible, pidiendo a la tierra que me tragara.  Sola mirando actualizaciones de Facebook en mi celular.

¿Cómo lo solucionaba? ¡Bingo! Como lo hice en la primaria, huía, cambiaba de trabajo.

Pero la vida, que es infinitamente sabia, me puso siempre alrededor de experiencias y seres humanos que me hicieron de espejo, y un día desperté.

 

 

EL PRINCIPIO DEL DESPERTAR (de dos tortazos)

A dos tortazos les debo mi actual vida, una de la que me siento orgullosa, una historia valiente que estaría dispuesta a vivir tantas veces como el universo considerara necesario.

 

TORTAZO 1

El primer totrazo me llenó la panza con 3.900 gr de amor, tenía 20 años y una carrera a medias. Si esta es la forma de aprender de los fracasos sentimentales, sin duda volvería a hacerlo.

Le prometí a esos ojitos inocentes ser una mejor versión de mí.

Ya sé que suena a frase de cajón, pero así pasó y no pienso cambiar una palabra de ese momento histórico en mi vida.

Aunque el sentirme a gusto en mi piel, con mis rasgos indígenas y en los 156 cm de estatura que la naturaleza me dio, sólo ocurrió 10 años después. Lo cierto es que después del nacimiento de mi primera hija algo me crujió por dentro.

Era un “voy a dar lo mejor de mí”, porque entendí que para darle lo mejor yo tendría que ser lo mejor.

En un genuino acto de humildad me reconcilié con mi amor, no con el físico, con el de adentro, el de las entrañas.

Empecé a sentirme merecedora, no salvadora ni heroína de nadie, sólo mía. Yo merecía amarme.

Años después miré esa cicatriz, aquí dolió y aquí sanó, ya estoy lista.

Y así me uní a otra naranja, y fuimos dos naranjas completas, aún con sombras gigantes, y decidimos rodar juntas con otras dos naranjitas.

 

TORTAZO 2

¿Cómo explicar que entre más ascendía en ese trabajo más infeliz era?

Te puede sonar raro, pero a pesar de ascender yo me sentía insuficiente, por mi cabeza pasaban pensamientos como: “no tienen a nadie más para ese puesto y por eso me lo dan”.

  • No me sentía respetada
  • Ni escuchada
  • Creía que todos hablaban mal de mí
  • Era una conspiración en mi contra

Entonces decidí renunciar y emprender con un negocio on line.

Yo sola contra el mundo, cero contacto con lo humano, “hasta luego pues”, “suerte es que les digo”.

(Espera un momento y termino de reírme de mí misma)

Todas mis sombras me siguieron.

Entré a una escuela virtual para aprender sobre emprendimiento online y quería que los tutores se fijaran en mí, y cuando no lo hacían sufría.

Cuando comentaba en los foros me quedaba horas refrescando la pantalla para releer lo escrito y confirmar que sí me había expresado correctamente.

Un carrusel de pensamiento me atropellaba cada noche, me carcomía las neuronas pensando cómo mis compañeros se hacían amigos en la plataforma sin siquiera conocerse “face to face”.

Me sentía como en esas reuniones en la punta de la mesa, mirando mi celular mientras mis colegas compartían risas y anécdotas.

Las mismas emociones. ¡No soy nadie! ¡Otra vez!

  • Insuficiente,
  • inferior,
  • mediocre,
  • monótona,
  • imprudente,

He tocado fondo.

«No son los trabajos que tengo, soy yo la que ha creado esto, lo he creado porque lo creo», esto fue lo que aprendí.

Pero puedo superarlo.

 

 

ROSANA 3.0

Una versión 3.0 no pasa de la noche a la mañana, no pasa como se te antoja. Pero grábate esto: nadie tiene que darte permiso para que ocurra, sólo eres tú.

Nadie tiene que darte permiso para que ocurra, solo eres tú Clic para tuitear

Para mí, fue un conjunto de acontecimientos con una pizca de nuevos conocimientos.

Hoy vivo en la aceptación continua de mis luces y mis sombras.

Tomé la decisión de levantar la mano siempre que mi corazón palpitara, anunciándome que un pensamiento debía materializarse en verbo.

Tomé la decisión de abrirme y confiar en nuevos seres humanos. Al principio fui torpe y acartonada, pero cada vez me sale mejor, y dejé de estar en la esquina de la mesa refrescando actualizaciones de facebook.

Cada ser humano es un mundo por descubrir y no quiero volver a perderme eso.

Salto a mis miedos, presento mis productos, aún acojonada, pero lo hago. No hay otra forma de superarlo.

 

 

MI CLAVE DE SANACIÓN

Sé que para sanar mis creencias limitantes primero debo aceptar que están ahí, dentro de mí haciendo su fiesta.

Siempre que una situación o persona perturbe tu paz date un momento para analizar qué pensamientos estás brotando en tu mente.

  1. No tengas miedo de darles voz, déjalos ser, escúchalos, muéstrales la luz, no los resistas.
  2. Cuando tengas claros esos pensamientos, pregúntate qué estás sintiendo.
  3. Y libera el pensamiento, la emoción y el sentimiento.

Tú no eres nada de eso, pero si no traes eso a la consciencia no podrás liberarlos, sanarlos, y continuarás en la repetición de patrones.

Cuando me sentía aislada de mis colegas de trabajo los juzgaba, los calificaba como engreídos, superficiales, lameculos.

Pero había pensamientos que no permitía brotar a la superficie, no les daba lugar, aún así estaban ahí.

Estos pensamientos me decían “ellos son mejores”, “tu eres inferior, no estás a la altura”, “eres rara”.

¿Entiendes lo que hice?

Detuve la voz que juzgaba y esculqué en mi fondo para comprender realmente qué era lo que me generaba ese dolor…

Ahí estaba la música de fondo, mis creencias limitantes.

Cuando me pregunté qué me hacían sentir esos pensamientos, encontré: miedo, rabia, dolor, envidia, celos, inferioridad.

Y al final me decía:

«No soy nada de eso, esto va a pasar. Gracias por darme la oportunidad de ver dentro de mí para sanar».

Por eso cada situación fue perfecta, por eso amé mi fondo, comencé a poner luz ahí donde estaban mis sombras.

 

 

CONCLUSIONES: Colombia tierra querida, ¡Gracias!

Bella patria, sin ti yo no sería posible.

No nací para Barbie, ni con dinero para convertirme en una cuando creía que lo necesitaba, pero hoy comprendo que enfrentarme a todos los estereotipos de la época me permitió comprender mi real belleza.

Uno de mis maestros me dijo: “Quererte a ti misma cuando te dicen que eres linda es muy fácil”.

Bien, a mi me tocó la otra parte: quererme y reconocerme hermosa a pesar de que nadie me lo dijera, sólo yo.

Tuve que cavar hondo para lograr brillar con luz propia, sin listones, y sacar todo ese torrente de energía y pasión por la existencia.

Esta es mi voz, y sólo Colombia podía ser el escenario para entrenarla, el universo no se equivoca con esas cosas.

No nací para Barbie, ni para ser un molde diseñado por la sociedad, nací para ser Rossana, única, auténtica e irrepetible, como tú. Es esto lo que hace girar al mundo.

Te invito a descargar gratis mi guía para comenzar a dirigir tu vida y generar experiencias satisfactorias.

¿Hay bloqueos en tu vida?

Cuéntame cuáles son e identifiquemos juntas esas creencias limitantes que te atropellan.

¡Te espero en los comentarios!

 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: autoestima femenina, cómo sanar las creencias de la infancia, complejos físicos en la mujer, superar las creencias limitantes

MINIMALISMO DE LA IMAGEN: Reflexiones de una mujer "sin un pelo de tonta"

5 agosto, 2018 por taniacarrasco 42 comentarios

Imagínate que vas por la calle y de repente te encuentras con una mujer joven totalmente calva…

Sé sincera, ¿qué es lo primero que pensarías?

El artículo de hoy te va a sorprender, porque además de acuñar un término poco utilizado como el «minimalismo de la imagen», va con vídeo incluido 😉

Pero para ver el vídeo tendrás que leer hasta el final. ¡No vale hacer trampas e irte directamente para abajo!

Hace tiempo que aviso de mis intenciones de raparme la cabeza…

  • Si ya me habías escuchado comentarlo en alguna ocasión y me conoces un poco, sabías que este momento llegaría.
  • Si ya me habías escuchado comentarlo y no me conoces mucho, pensarías que me estaba marcando un farol para atraer seguidoras.

¿Qué piensas ahora?

¿Crees que una mujer es capaz de quedarse calva por elección personal?

¿Qué motivos llevan a una mujer sin problemas de alopecia a raparse la cabeza?

¿Habías escuchado hablar de minimalismo relacionado con la imagen física?

Vamos a responder juntas a estas cuestiones en un momento, sigue leyendo.

QUÉ ES ESTO DEL MINIMALISMO DE LA IMAGEN

Estoy convencida de que te identificas mucho con tu imagen física:

  • Con tu forma de vestir
  • Con tu forma de peinarte
  • Con tu color de pelo (con tu tinte habitual quiero decir)
  • Con el modo en que te maquillas
  • Con aquellos aspectos de tu imagen que sabes que gustan a los demás

Pero déjame que te haga una pregunta: ¿cuáles de todos esos aspectos relacionados con tu imagen mantendrías igual si vivieses sola en una isla desierta?

Hace tiempo que te planteo estas cuestiones porque son temas que a mí me preocupan mucho y me hacen cuestionarme mis propias contradicciones.

Por eso he querido ir un poco más allá con el tema del minimalismo e inaugurar el «minimalismo de la imagen».

El minimalismo es mucho más que aprender a decorar tu casa con pocos objetos y superficies blancas. De hecho, suelo trabajar con temas de minimalismo en mis cursos de autoestima porque te ayuda de verdad a liberarte de cargas innecesarias.

Pero lo que te voy a contar va mucho más allá.

El minimalismo existencial, desde mi punto de vista, implica:

  • Decir adiós a objetos que no utilizas pero también…
  • Despedirte de creencias limitantes
  • Dejar atrás compromisos absurdos
  • Aprender a gestionar tus emociones para centrarte en las que te ayudan a evolucionar
  • Y acabar con relaciones tóxicas que no te llevan a ningún sitio

Pero, ¿dónde cabe aquí el minimalismo de la imagen?

El minimalismo de la imagen va todavía más allá y significa:

  • Dejar de comprar ropa que no necesitas
  • Dejar de usar maquillaje y productos que en realidad solo son un parche para temas más profundos
  • Desapegarte de la identidad que te aporta esa imagen física que te has creado con los años
  • Practicar de verdad eso que dicen de que «lo que importa es el interior»
  • Sin que eso implique estar dejada de la mano de Dios, ni una excusa para pasar de cuidarte

¿Pero acaso «cuidarte» es ir a la peluquería cada mes a taparte las canas?

Creo que utilizamos el término «cuidarnos» de forma bastante frívola.

Y perdóname que te lo diga así, de sopetón.

EN QUÉ TE PUEDE AYUDAR A TI EL MINIMALISMO DE LA IMAGEN

Como te comentaba antes, trabajo los temas de minimalismo en mi curso online TúPoderosa, porque he comprobado en mis propias carnes lo mucho que ayuda.

¿A qué ayuda?

1. A emplear tu energía en lo verdaderamente importante

Porque si dedicases menos energía en estar visualmente aceptable, podrías emplear ese tiempo y esa energía en temas que te hagan sentir bien de verdad, por dentro y por fuera.

2. A sentirte guapa y libre al mismo tiempo

Porque tienes que reconocer, siendo muy honesta contigo misma, que muchas veces sentirte guapa implica ser prisionera de tu imagen.

Arreglarte, porque los demás tienen que verte medianamente decente, hace que sacrifiques tu libertad. Esa libertad que sientes cuando vas recién duchada y descalza por la casa.

Justo ayer escuchaba a un artista decir: «El grado de vergüenza que sientes al ponerte cierta ropa es directamente proporcional a la comodidad que experimentas».

Es decir, si sales a la calle con ropa con la que te da vergüenza que te vean, con total seguridad esa ropa es de lo más cómodo que tienes.

3. A dejar a un lado las opiniones ajenas para estar a gusto contigo misma

Porque cuando superas esa fase de tener que gustarle a todo el mundo, te sientes mucho más a gusto y en coherencia contigo misma. Empiezas a ser tú, sin ataduras, y eso te hace sentir genial, te empodera.

4. A tener espacio para que lo nuevo llegue a tu vida

Ya habrás escuchado esa frase que dice que «para que lo nuevo entre lo viejo tiene que salir».

Y, en este caso, si lo relacionamos con el minimalismo de la imagen, si estás buscando una evolución personal como mujer pero te sigues identificando con tus antiguos patrones de imagen, la mujer radiante, libre y plena que vive debajo de eso no puede salir, no puede manifestarse.

Se pasa años esperando a que la dejes abrir sus alas.

5. A quitarte de encima la ansiedad, el miedo y la inseguridad

No me digas que no es estresante cuando se te pegan las sábanas, te levantas con media hora para llegar al trabajo y sabes que tardas una hora y media en arreglarte en condiciones. ¡Ansiedad profunda desde bien entrada la mañana!

O ¿qué me dices de cuando tienes una boda a las 12 del medio día y te han dado cita en la peluquería a las 10?

Ya sabes que vas a tener que correr como una campeona y que, aún así, no vas a ver a la novia llegar a la Iglesia (al juzgado o donde sea).

Ahora piensa que tienes esa misma boda a las 12 del medio día pero que no tienes que ir a la pelu, ni pintarte las uñas, ni ponerte kilos de maquillaje…¿No respiras mejor?

Vale, vale, quizá no respiras mejor porque estás pensando en ¡cómo se me ocurre plantearte que vayas a una boda sin maquillar y sin peinado de peluquería!

Piensas en las miradas de los demás y eso es lo que te genera la ansiedad.

Ahora piénsalo e imagina que a los demás les diese exactamente igual cómo vas a la maldita boda…

No, no me engañes, ni te engañes a ti misma diciendo que te da igual lo que piensen los demás, que te arreglas por ti.

Carcajada + pedorreta 😉

Eso mismo pensaba yo hasta que me atreví a decirme la verdad.

Pero no te equivoques, no quiero dejar a las peluquer@s y maquillador@s sin trabajo.

Me parece un trabajo muy digno y me parece estupendo que te arregles.

Lo que no me gusta es que te mientas, como me he estado mintiendo yo durante tantos años…

Esto no es un tema superficial con el que quiero hacer que te vuelvas hippie. Yo no soy hippie, me pongo cacao de labios cuando grabo los vídeos para ti 😉

Una de las ideas que quiero transmitirte es que quizá, solo quizá, ponemos demasiada energía en temas que no nos ayudan, y podríamos equilibrar esas energías para sentirnos mejor con nosotras mismas.

Cada una en la medida que considere, no hay un baremo exacto para esto. Ni ninguna mujer es mejor o peor que otra según su grado de maquillaje.

CÓMO PRACTICAR EL MINIMALISMO DE LA IMAGEN SIN SENTIRTE MAL

Las dos somos conscientes de las ampollas que puede levantar todo lo que te estoy contando.

¡No importa!

Está bien que aparezcan resistencias y pensamientos contradictorios porque eso significa que hay algo que se está removiendo.

Tampoco importa si estás de acuerdo conmigo o no, lo importante es que haya respeto entre nosotras. Y me consta que de eso hay mucho.

Te respeto en pelotas y cuando vas maquillada como una puerta. ¡Cómo no lo voy a respetar si yo también he pasado por ahí! Respeto absoluto ante todo.

Pero por si quieres experimentar con el minimalismo de la imagen como estoy haciendo yo desde hace unos años, te cuento las ideas que yo ya he utilizado y que me hacen sentirme mejor cada día:

RESPECTO A LA ROPA

  • Prueba a no llevar sujetador a ver cómo te sientes: al principio será raro, como todo o nuevo.
  • Compra solo la ropa que verdaderamente necesitas y la que llevas años sin ponerte dónala.
  • Usa prendas que te hagan sentir bien (por ejemplo, yo ya no me siento cómoda llevando ropa ajustada)
  • Deja espacio en los armarios para que la energía circule, para que la ropa que te gusta respire. Para que al abrirlo no tengas que perder 30 minutos, sino más, en elegir qué diablos te pones.

RESPECTO AL MAQUILLAJE Y LOS POTINGUES VARIOS

  • Quédate con los mínimos productos posibles: tienes cajas, cajones, neceseres, llenos de potingues. Fijo que algunos hasta se te caducan porque a mí me pasaba muy a menudo.

Y no solo te hablo de maquillajes, lacas de uñas, pintalabios, rímeles, coloretes, sombras de ojos y los diferentes utensilios para distribuir esos potingues por tu cara…

También te hablo de todo tipo de mascarillas, champús, sérums (¿para qué narices sirven los sérums?), cremas de todas las clases, para cada momento del día y para cada parte del cuerpo.

Hace mucho tiempo que solo tengo en casa un rímel y una barra de labios, ¡te lo juro!

  • Prueba a dejar de maquillarte por inercia y hazlo solo cuando de verdad sientas que tienes que hacerlo.

RESPECTO A TU PELO

  • Prueba a amar tu pelo tal y como es, sin más: si hay canas, hay canas. No veas cómo me brilla el pelo y lo mucho que me gusta cuando un hombre me dice: «¿es que no te piensas tapar las canas?». ¡Pues no cenutrio, no!
  • Minimiza el tiempo que malgastas arreglándolo. Seguro que hay un camino más corto que te deja tiempo para otras cosas que te apetecen más.

RESPECTO A LAS CREENCIAS QUE TE DICEN QUE TE VES FEA AL NATURAL

Y esta es la parte más importante.

Ya sabes que:

  • Cuando te miras al espejo recién levantada
  • Cuando alguien te ve sin maquillar
  • Cuando tu cabeza parece un nido de cigüeñas esquizofrénicas
  • Cuando te has probado mil modelitos y hoy es uno de esos días en que nada te sienta bien

Tu cabeza juega en tu contra y te bombardea con pensamientos como:

  • «¿No te de verüguenza salir así a la calle?»
  • «¡Qué van a pensar de ti en la oficina con las ojeras que tienes hoy!»
  • «¡Madre mía que pelo más asqueroso!»
  • «Espero no encontrarme con alguien conocido con las pintas que llevo».

Esta es la parte más importante del minimalismo de la imagen y que podrás aplicar en cada ámbito de tu vida.

¡Tu mente la controlas tú!

¡Ya es hora de dejar de leer sobre temas relacionados y empezar a practicarlo!

Prepara a tu mente para verte genial, esté como esté tu aspecto exterior.

  • Dile lo bonita que eres incluso cuando no te maquillas
  • Sonríele a esa mujer hermosa y natural que ves por las mañanas en el espejo
  • Pásate por el arco del triunfo los estereotipos y viste como te dé la real gana

¡Libérate!

Cuesta un poco pero luego no hay vuelta atrás y te sientes como una diosa.

Y cuando alguien ose a hacer algún comentario hiriente sobre lo verdaderamente guapa y libre que eres al natural…

Carcajada + pedorreta 😉 ¡Y sonrisa triunfal!

Si es necesario puedes aderezar la mezcla con un «¡Que te den, cenutrio!», así por lo bajini. Poco a poco no te hará ni falta, pero al principio ayuda.

POR QUÉ NO ENCONTRARÁS NINGUNA OTRA PUBLICACIÓN QUE HABLE DE MINIMALISMO DE LA IMAGEN SI YA ESTÁ TODO INVENTADO

(Ya queda menos para la vídeo-sorpresa, aguanta un pelín)

¿Cuántas veces has escuchado eso de «ya está todo inventado»?

¡Millones!

Y el caso es que no, no está todo inventado.

Cuando te hablo de «ser tú misma», no me refiero solo a la imagen exterior que muestras al mundo para sentirte más querida.

Hay muchas más cosas en el «ser tú misma»…Frase gastada y agotadoramente aburrida, por cierto.

En el caso de los estereotipos femeninos, el «ser tú misma» se puede convertir en una cárcel preciosa, que te dicen por todos lados que es la única a la que puedes aspirar.

Es por eso que si pones en google «minimalismo de la imagen», te saldrán un montón de publicaciones relacionadas con el minimalismo en la fotografía.

Es por eso que si pones en google «mujeres calvas» o palabras parecidas, solo te saldrán artículos de enfermedades y situaciones que llevan a las mujeres a estar calvas, en contra de lo que desearían.

Bueno, con suerte encuentras un montón de imágenes de modelos que han tendido la osadía de afeitarse la cabeza y ser solo «un poco» criticadas.

Tenemos, las mujeres, demasiado interiorizado este tema de la imagen exterior según han decidido las empresas publicitarias.

Por eso es raro, rarísimo, que una mujer se plantee raparse la cabeza de forma voluntaria (claro claro, a no ser que sea lesbiana…¿perdón?).

Por eso no encontrarás muchas publicaciones de este tipo porque está muy mal visto pensar así.

  • Está mal visto por la sociedad en general, que no se cuestiona los estereotipos puesto que mantienen las cosas tal y como están. A nadie le gusta salir de la zona de confort a lo loco.
  • Está mal visto incluso por las mujeres que son prisioneras de su imagen, porque se sienten atacadas y muertas de miedo al pensar que se tendrían que deshacer de esa imagen «tan bonita» con la que se sienten protegidas.
  • Está mal visto ir contracorriente porque eso provoca que otras personas se tengan que hacer preguntas para cuyas respuestas pueden no estar preparadas.

Justo la semana pasada, una «amiga» me enviaba una foto muy bien peinada y maquillada, donde decía algo así como: «Hoy es el día de mimarme, de cuidarme, de sentirme una mujer completa…».

Mientras sigamos pensando que para ser una mujer completa hay que ir a la última moda, pintarse el ojo y arreglarse bien el pelo…¡estamos jodidas!

Una mujer completa puede ir maquillada o no, pero no son esos detalles los que le dan valor.

Tú no tienes más valor que yo por ir más mona, ni yo tengo más valor que tú por dejar de maquillarme.

CONCLUSIONES

Me he dado cuenta de que cuando escribo este tipo de artículos el tiempo se congela para mí.

Me duelen, pero me motivan y los disfruto muchísimo.

Casi tanto como cuando alguien me pregunta por algo relacionado con el feminismo.

Soy yo, me sale mi vena reinvindicativa que, por otro lado, al mismo tiempo es más respetuosa que nunca.

Y ha llegado el momento de mostrarte la vídeo-sorpresa que te comentaba al principio.

Porque creo que sería un grandísimo paso para ti como mujer, empezar a hacer las cosas porque quieres.

Que cuando vayas a hacer algo pienses: «¿Lo hago porque me apetece o por complacer a alguien? ¿Esto que voy a hacer me hace más libre?».

Desde que yo misma me hago este tipo de preguntas todo está cambiando mucho.

Puedes verlo aquí y contarme qué te parece todo esto. Te advierto que este vídeo puede herir tu sensibilidad y el de las personas de tu alrededor.

Y cuando termines de verlo:

  1. Respóndeme a la pregunta que te planteo por favor: ¿qué quedaría de ti si todo lo relacionado con la imagen física con la que te identificas cambiase?
  2. Comparte si crees que es útil para alguien
  3. No te olvides de suscribirte al canal para que los vídeos te lleguen directamente

Un abrazo muy grandísimo

Tania

P.D: Como sabes, me dedico al mundo de la salud física a través de la Nutrición y el Método Pilates, pero no para seguir fomentando tu autoexigencia sino tu salud real.

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: autoestima, autoestima femenina, como liberarse de los estereotipos, minimalismo, minimalismo de la imagen, minimalismo existencial, mujeres libres y valientes

¿TE GUSTARÍA SER LA MUJER MÁS DESEADA DEL MUNDO RÁPIDAMENTE?

18 junio, 2018 por taniacarrasco 10 comentarios

Conseguir ser la mujer más deseada del mundo suena difícil (muy difícil) y pretencioso (muy pretencioso).

Pero es un objetivo secreto que tienes, ¿verdad?

Quieres ser la mujer más deseada del mundo pero no se lo cuentas a nadie porque van a pensar que eres una flipada.

Lo que tú no sabes es que la mayoría de las mujeres que conoces también quieren ser lo mismo que tú.

Así que si quieres ser diferente y dejar de parecer un clon igualito que ese otro montón de mujeres, te invito a que leas este artículo 😉

¿Te vienes?

POR QUÉ QUIERES SER LA MUJER MÁS DESEADA DEL MUNDO

Para ti como mujer, ser deseada es sinónimo de ser querida.

Sí, conmigo puedes ser sincera. Y sobre todo, contigo tienes que ser sincera.

Quieres ser la mujer más deseada del mundo…

  • Por los hombres: porque eso te hace sentirte poderosa.
  • Por las mujeres: porque ser envidiada es una sensación muy gratificante.
  • En el trabajo: porque necesitas sentir que lo que haces es muy valioso.

Digamos que no es que quieras ser la mujer más deseada del mundo, sino que lo necesitas. Se convierte en algo casi patológico.

Lo chulo es que tú a penas sospechabas que actuabas así, y los demás todavía no se han dado cuenta. Eso te da ventaja, tus máscaras te han dado tregua hasta ahora. Pero ¿hasta cuándo crees que podrás sostener esa imagen?

Y ¿por qué te pasa esto?

LOS DOS MOTIVOS POR LOS QUE NECESITAS SER LA MUJER MÁS DESEADA SOBRE LA FAZ DE LA TIERRA

Quizá haya otros muchos motivos, pero para mí estos son los más importantes:

  1. El afecto es una necesidad primaria de toda ser humana (del ser humano también).

Tú, como persona, necesitas sentir el afecto de las personas que te rodean. Sin ese afecto, te mueres, enfermas, tu vida no tiene sentido.

Y como te han enseñado que cariño y deseo es lo mismo, la sensación que tienes al sentirte deseada es muy similar a la que experimentas cuando alguien te muestra su afecto:

  • Sientes que eres especial
  • Sientes que esa persona te necesita
  • Sientes que tu existencia es fundamental en el mundo

Por ello, al igual que necesitas el cariño para vivir también necesitas sentirte deseada. Se ha convertido casi en una necesidad primaria.

      2. Si no despiertas el deseo sexual en otras personas no eres válida para la sociedad.

¿Has visto la película «Que se mueran los feos»?

Pues algo así…

En esta sociedad en que vivimos, ya solo les falta aprobar la pena de muerte para todas las mujeres que son:

  • Más feas
  • Más gordas
  • Más bajitas
  • O más «lo que sea» de lo socialmente establecido

De este modo, te tienen preocupada pensando

  • en los 9 millones de cremas,
  • el medio millón de operaciones
  • y la cantidad de horas de gimnasio que necesitas

¡para tener derecho a la vida!

Si estás preocupada por todo eso, ya no te quedarán fuerzas para trabajar en lo verdaderamente importante: tu propio amor.

CÓMO GESTIONAR EL MIEDO A NO SER LA MUJER MÁS DESEADA

Te voy a ser muy sincera…

Es bastante complicado luchar contra el peso de una sociedad entera que nos tiene tan bien aleccionadas.

¡Pero no imposible!

Me he pasado ¡30 años de mi vida! obedeciendo a los patrones impuestos por el miedo a no ser deseada.

Sí, a mí también me ha pasado esto.

Tan patológico era lo mío, que podía pasarme la noche aguantando a un baboso en el que no tenía ni el más mínimo interés, solo para que me regalasen el oído. ¡Solo para sentirme deseada!

Yo decía que era por educación, pero mis amigas se ponían de los nervios.

Supongo que a ti también te han metido ese miedo en el cuerpo.

  • El miedo a no gustar
  • El miedo a envejecer
  • El miedo a ser invisible para los hombres

Y solo hay una forma de acabar con esta presión…

EL SECRETO PARA SER LA MUJER MÁS DESEADA DEL MUNDO DESDE HOY Y PARA SIEMPRE

Lo que te voy a contar no es ninguna tontería.

Quizá te parezca obvio pero fue hace muy poco tiempo, con una frase que escuché a un gran maestro, cuando en mi cabeza saltó el clik.

La frase era la siguiente: «No hay nada más atractivo que alguien que no necesita gustar».

¡Ese es el secreto mejor guardado!

No hay nada más atractivo que alguien que no necesita gustar. Clic para tuitear

Y a las personas atractivas se las desea, ¿verdad?

Ahora, piensa en aquella persona a la que se le notaba a la legua que estaba coladita por ti.

¿Cómo te hacía sentir el hecho de que fuese tan evidente que estaba loco por ti?

Sí, te hacía sentir querida y deseada.

Pero ¿al mismo tiempo te hacía sentir deseo hacia esa persona?

¡Claro que no! Incluso si se le notaba demasiado podía llegar a provocarte rechazo, ¿verdad?

Lo mismo pasa con las mujeres a las que se les nota demasiado que quieren llamar la atención, que necesitan cariño y que se esfuerzan mucho por gustar.

Si son muy guapas tendrán muchos pretendientes, pero sus relaciones no serán buenas porque sus necesidades patológicas acabarán saliendo a la luz.

Ahora piensa en esa mujer que se siente tan bien consigo misma que no necesita gustarle a nadie (si no encuentras ninguna mujer así tendrás que pensar en un hombre).

Piensa, piensa…te puede costar encontrarla pero seguro que conoces a alguien que cumpla este patrón.

¡Pues a esa mujer se la rifan!

  • Una mujer que se muestra segura de sí misma
  • Una mujer que no necesita arreglarse por pura necesidad
  • Una mujer que se atreve a ser ella misma, sin tapujos

¡Esas son las que arrasan y las que construyen las relaciones de pareja más sanas!

¿Por qué?

Porque tienen una mejor relación consigo mismas y no necesitan a nadie. Simplemente lo eligen, pero no lo necesitan.

CONCLUSIONES

Soy consciente de que es más fácil:

  • Arreglarse
  • Maquillarse
  • Intentar ir a la moda

Que luchar contracorriente y trabajar en un cambio duradero.

No solo soy consciente sino que yo también me pasé muchos años huyendo de la verdadera solución.

Pero te prometo, TE GARANTIZO, que cuando dejas de intentar ser alguien «hacia fuera» y te permites el lujazo de ser alguien «hacia dentro», te conviertes en la mujer más deseada del mundo.

¡Y entonces serás la mujer más deseada del mundo de verdad y para siempre!

Porque los cambios interiores son los cambios duraderos, los que marcan la diferencia, los que te hacen mejor por fuera y por dentro.

Y no es ningún tópico, esta es la realidad.

Seguro que esto también te ha pasado alguna vez:

Vas por la calle y ves a una pareja: él es un cañonazo de tío y ella una mujer de lo más normalita, incluso tirando a fea.

Y piensas: «¿Pero qué hace ese macizo con esa chica?».

Me atrevo a poner la mano en el fuego a que esa chica es:

  • una tía súper segura de sí misma,
  • con una autoestima bastante sana
  • y que es capaz de cubrir ella misma sus propias necesidades sin dramatizar.

¿No sería maravilloso poder conseguir todo eso por ti misma sin depender de otra persona?

¿No sería maravilloso sentirte deseada por ti cada día de tu vida?

¿No sería maravilloso perder el miedo a no ser suficiente?

Pues hay otra forma de conseguirlo: potenciar tu salud física para que eso se refleje fuera y sobre todo te haga sentir bien por dentro. Consúltame aquí sobre mis programas para ayudar a tener un peso sano y la energía que necesitas.

¡Te espero en los comentarios!

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: autoestima femenina, autoestima para mujeres, como conseguir gustarle más a los hombres, como conseguir tener una mejor autoestima, como ser la mujer mas deseada, quiero ser la mujer mas deseada, ser la mujer mas deseada

50 COSAS QUE NO SABES DE MÍ

11 junio, 2018 por taniacarrasco 25 comentarios

Siento que tú y yo tenemos una relación muy estrecha y, sin embargo, hay muchas cosas que no sabemos la una de la otra.

Por eso he querido escribir este post, para conocer más cosas de ti a través de todas las cosas que tú no sabes de mí.

Por eso y porque HOY ES MI CUMPLE y quería utilizar esta excusa para escribir algo más personal.

Como ya me conoces un poquito, sabes que no tengo inconveniente en hablar de mi vida en general. Aún así, estoy segura de que muchas de estas curiosidades que te voy a contar te van a sorprender.

¿Te apetece que nos conozcamos un poquito más?

 

¡Pues aquí tienes 50 cosas sobre mí que seguramente no sabías!

 

  1. Empecé a bailar con 3 añitos y no lo dejé nunca. También emnpecé a hacer Karate a esa edad pero eso acabó unos años después.
  2. Con 12 años me fui a estudiar a un colegio interno en Madrid. Estaba loca por salir del pueblo para poder dedicarme al mundo del baile de forma más profesional. Salió «mal», pero fue uno de los años más gratificantes de mi vida.
  3. En mi época adolescente siempre vestía con minifalda. Para salir de fiesta quiero decir. Me ponía minifaldas tan minis que cuando me despedía de mi padre me ponía un abrigo largo para que no se diese cuenta y me obligase a cambiarme de ropa.
  4. He coleccionado brujas hasta hace muy poco, estaba obsesionada con el mundo esotérico. Hasta que me harté de que todo el mundo me hiciese los mismos regalos para todas las ocasiones y dejé de coleccionar nada.
  5. Con 14 años me hice mi primer tatuaje, sin el consentimiento paterno por supuesto. ¿A que no adivinas lo que era? ¡Una bruja! Además me la tatué en el pecho, bien arriba por si algún día le daba a mis tetas por crecer y desfigurarme el tatuaje. Eso nunca pasó.
  6. Uno de mis sueños de la infancia era convertirme en la primera mujer presidenta del Gobierno Español. Aunque mi padre sigue insistiendo para que me meta en política es algo totalmente descartado que no tiene el más mínimo interés para mí.
  7. Hasta que cumplí los 15 años más o menos, iba a misa todos los domingos. Fui catequista y luego atea. Mi espiritualidad ha evolucionado mucho en estos años.
  8. Soy un desastre con todo lo que tenga más de dos botones. Ahora que me dedico al mundo online he tenido que aprender mucho y muy rápido, pero sigo teniendo mucha dificultades con los botones, la tecnología y todo ese tipo de cosas.
  9. Odio cocinar.
  10. Estudié piano 2 años. También empecé con la guitarra, pero eso me duró unos mesecillos.
  11. Cada día que pasa valoro más a mi familia y admiro más a mis padres y hermanas. ¡Aprendo tanto de ell@s!
  12. He querido tener moto desde que tengo uso de razón, pero fue a los 14 cuando la tuve por primera vez. No es que me apasionen las motos, solo era la necesidad de parecer una tía dura y fuerte. Claro que eso lo sé ahora, en su momento no tenía ni idea.
  13. He sido vegetariana 10 años, pero ahora como de todo y hay pocas cosas que no me gusten. No descarto volver a hacerme vegetariana, pero hay que hacerlo bien.
  14. Entre esas pocas cosas que no me gustan están las habas y el pepino. Tampoco soy muy amante de la carne.
  15. Estuve a punto de trabajar en una línea erótica, hice el curso preparatorio y todo. Fue divertido sin duda pero luego me eché atrás…Mi familia pasaba por una mala época económica y quise buscar un trabajo por las noches. Por el día ya trabajaba. Pero al final recapacité y entendí que no podría estar mucho tiempo trabajando por el día y por la noche y que eso no era viable.
  16. A los 23 años me marché a Londres con la intención de quedarme a vivir, pero todo me salió tan mal que a los dos meses estaba de vuelta en casa.
  17. Me encanta el claqué. Aprendí cuando estudiaba Teatro Musical en Madrid y lamento mucho no poder seguir haciéndolo.
  18. Para mí, el día más importante del año es el día de mi cumpleaños. Antes montaba unas fiestas muy serias, pero ya soy una niña mayor y me comporto «mejor». En una de esas fiestas, incluso tuvo que venir la policía porque estábamos armando un follón de miedo. Ahora para celebrarlo escribo artículos…:-)
  19. El segundo día más importante del año para mí es el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Obvio.
  20. Me molesta horrores que me quiten años, porque como siempre he trabajado cara al público considero que eso también me resta credibilidad como profesional. ¿Serán cosas mías?
  21. Voy de lista pero soy bastante ingenua para muchas cosas (no te las cuento porque entonces estoy perdida).
  22. Mi canción preferida del mundo mundial es «Dont´s Speak» de No Doubt. Además, no me recuerda a nada ni a nadie, es una cosa mía y únicamente mía.
  23. Me apasiona estar sola en casa, de toda la vida. Esa sensación de paz y libertad…¡Qué gustazo!
  24. Como ya habrás deducido, una de mis mayores pasiones es bailar, sobre todo Hip-Hop y bailes latinos. Sin embargo, no me gusta escuchar ese tipo de música en mi día a día porque me entra tanto mono de bailar que me pongo de mala leche si no puedo hacerlo.
  25. Nunca he querido casarme ni ser madre, pero lo primero ya lo hice y lo segundo ya veremos. Como dicen mis amigas: «Deja de escupir para arriba que luego siempre te cae».
  26. No admito un «porque sí» o «por que es así», como respuesta a ninguna pregunta. ¿Cómo que porque sí? ¡Porque sí, no! ¡Alguna razón habrá!
  27. Amo conducir mi coche y en soledad. Hacer viajes largos con mi silencio o con mi música. Y hay muchas otras cosas que me gusta hacer sola.
  28. No soy una persona especialmente viajera, pero desde mi súper viaje por Asia no paro de pensar en cuándo será la próxima vez.
  29. Tampoco soy especialmente amante de los animales. Me gustan, sin más, no me vuelvo loca.
  30. Adoro los ratos con mis amigas alrededor de una mesa de una casa cualquiera en un momento cualquiera.
  31. Soy de las personas que prefieren arrepentirse de lo que hacen que de lo que no hacen. 
  32. También soy de esas personas que se ponen las expectativas muy altas pero que están preparadas para tolerar la frustración de no llegar a alcanzarlas.
  33. Soy bastante cabezota. 
  34. Me irritan las personas impuntuales. Valoro mucho mi tiempo y el de l@s demás y me repatea que no se valore el mío.
  35. Uno de los sueños de mi vida es tener una casa grande en el campo donde poder hacer retiros de meditación y terapias naturales.
  36. Me ponen triste las mentiras y las manipulaciones. Por eso me cuesta mucho trabajo ver las noticias en la TV y mantener la ecuanimidad.
  37. Creo que tenemos un sistema que ya no funciona (económico, social, político, educativo…) y que está en nuestras manos llevar por otro camino.
  38. Creo en el amor libre, aunque también creo que, como sociedad, no estamos preparad@s para ello.
  39. Nunca me ha gustado dormir demasiado, tengo la sensación de estar perdiendo el tiempo. Aunque ya le voy cogiendo el gustillo 😉
  40. He sido una gran maniática de la limpieza, pero también me estoy relajando con eso porque así no se puede vivir. Pero, por ejemplo, si duermo en una cama ajena donde sé que no se han cambiado las sábanas, directamente no pego ojo. ¡Tal cual!
  41. Me da miedo hacer el pino. ¡Sí! Soy deportista de toda la vida y jamás he hecho el pino (quizá alguna vez y si me sujeta alguien). Tampoco entiendo qué me pasa con esto.
  42. Si tuviera que ponerle los cuernos a mi novio sería con Will Smith, Jon Bon Jovi o Yotuel Romero, no hay ningún otro hombre que se merezca tal privilegio, de momento 😉
  43. Reconozco que estoy un poco loca y a veces tengo pensamientos que escapan de toda lógica…Si no, no te estaría escribiendo desde mi propio negocio online porque no se me habría ocurrido esta «brillante» idea.
  44. Tomo grandes decisiones con facilidad, no me cuesta trabajo hacer cambios y afrontar retos. Peeeeero si las decisiones no tienen importancia como, por ejemplo, elegir una peli en el cine, me puedo pasar un rato largo hasta que tomo la maldita decisión.
  45. Me apasiona ver musicales en el teatro. En el cine no me gusta tanto, no se respira el mismo ambiente, la gente no se levanta para aplaudir y bailar.
  46. A lo largo de mi vida me han confundido con personas de diferentes países: con una marroquí, una nepalí, una balinesa y lo último fue cuando me preguntaron si era boliviana. ¡Me encanta! No lo entiendo, ¡pero me encanta!. Igual Benetton me ficha para su próxima campaña publicitaria.
  47. Me encanta abrazar y que me abracen, hacer reír a la gente y el olor de la tierra después de llover.
  48. Ya no discuto con la gente (solo con Manué). No gasto energía en intentar convencer a nadie de nada, ni en imponer lo que pienso, ni en cabrearme cuando alguien no me entiende. Pero antes lo hacía muy a menudo.
  49. Soy extrovertida, sí, pero para que esa parte de mí salga a la luz se me tiene que «dar permiso». Si nos conocemos por primera vez, no seré yo quien se acerque a ti a no ser que entienda que estás interesada en hablar conmigo. Una cosa muy rara esta…Eso sí, si ya he tenido un primer contacto contigo, la próxima vez que te vea te trataré como si te conociese de toda la vida. Parezco muy sociable pero, en realidad, me gusta mucho estar en mi «cueva».
  50. Estoy convencida de que la solución para todos los males del mundo es el AMOR. Y, aunque lo he pensando desde pequeñita, ahora no solo lo pienso sino que también lo sé e intento ponerlo en práctica.

¡Ahora te toca a ti!

¿Te has sentido identificada con alguna de mis rarezas?

¿Qué es lo que más te ha sorprendido?

¿Me cuentas alguna curiosidad tuya?

 

Montones de abrazos 🙂

 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: autoestima femenina, cosas sobre mí, curiosidades, el amor puede cambiar el mundo, sobre mí

DEJA DE SER UNA FEMINISTA ACOMPLEJADA Y LUCHA POR LO QUE CREES

16 octubre, 2017 por taniacarrasco 6 comentarios

¿Cómo? ¿Qué tú no eres feminista?

¡Eso no es verdad! Y te voy a demostrar por qué…

Y tú, ¿crees que porque seas un hombre no puedes ser feminista?

¡Pues también te equivocas! Hay muuuuuuchos hombres feministas. Bueno, vale, no tantos, pero alguno hay 😉

 

Si resulta que eres una persona:

–         Que cree en la igualdad entre seres humanos.

–         Si eres alguien cuya filosofía de vida incluye el respeto por todo el mundo independientemente de su sexo y su condición.

–         Si te has visto sometida como mujer en algunos aspectos de tu vida y eso te ha cabreado.

–         Si eres un hombre coherente que no sólo defiende la igualdad sino que la practica en su vida sirviendo como ejemplo de aquello en lo que cree…

¡Eres feminista!

–         Por mucho que odies la palabra.

–         Por mucho que te empeñes en negarlo porque ser feminista no queda bonito.

–         Por muchas vueltas que quieras darle al término y te tragues las connotaciones negativas que han querido atribuirle…

¡Estamos en el mismo barco!

Lo único que puede estar pasando es que seas una feminista acomplejada… y tú no quieres ser eso ¿verdad?

 

 

 

 

 

¿QUÉ ES UNA FEMINISTA ACOMPLEJADA?

Pues una feminista acomplejada es aquella persona que, a pesar de que sus ideas están orientadas hacia la consecución de un mundo más igualitario, no se atreve a expresar su opinión abiertamente por diversos motivos:

–         Tiene miedo al qué dirán.

–         Cree que sus opiniones no son suficientemente valiosas.

–         Se siente inferior en algún sentido.

–         Siente la necesidad de luchar por lo que cree pero no sabe cómo hacerlo para no ser juzgada.

–         Se deja influir por lo que otras personas dicen en lugar de cuestionarlo para construir sus propias opiniones.

 

 

POR QUÉ EL FEMINISMO PUEDE AYUDARTE A SER MÁS FELIZ

Es cierto que a lo largo de mi trayectoria feminista, que empieza cuando salgo del útero de mi madre, mi forma de pensar y proceder ha cambiado mucho.

Sigo hablando de feminismo, pero inventé el “feminalismo” porque encajaba mucho mejor con la evolución que yo misma estaba teniendo como mujer.

En este artículo te cuento todo lo referente a mi filosofía, “el feminalismo”, para que entiendas perfectamente mi forma de ver las cosas en estos momentos. Es importante que lo leas para que entiendas mucho mejor lo que voy a contarte a continuación.

En ese artículo también comprenderás que tanto si se habla de feminismo, de feminalismo o de igualdad, ese camino te acerca a la felicidad porque:

–         Te reafirma como mujer.

–         Te empodera para que te sea más fácil conseguir tus objetivos.

–         Te libera de la carga de los estereotipos.

–         Te aleja de la prisión de la imagen física que te has contruido para gustar a los demás…

 

 

¿TIENE COMPLEJOS UNA PERSONA FEMINALISTA?

Sí, definitivamente sí, una persona feminalista también tiene complejos.

¿Por qué ibas a querer entonces ser una mujer feminalista?

Muy sencillo…

Va a ser muy difícil que dejes atrás los complejos para siempre, lo que no es tan difícil es aceptar que tienes complejos, debilidades y miedos, y que eso no signifique un freno en tu camino.

Acuñando el término «feminalismo» entendí que era una mujer con muchos complejos pero que el hecho de darme cuenta y querer deshacerme poco a poco de mis limitaciones me haría más libre, más auténtica.

Comprendí que había estado tapando mis inseguridades y que había llegado el momento de liberarme de mis propias máscaras. 

Si conseguía ser más libre y más auténtica, sería porque habría conseguido quererme lo suficiente para entender que la libertad y la autenticidad no tienen que ver con la perfección.

La libertad y la autenticidad tienen que ver con aceptarte como eres, buscar el camino que te ayude a amarte cada día más y conseguir las herramientas para cambiar las cosas que te hacen mal.

 

 

DIFERENCIA ENTRE “QUERER CAMBIAR LAS COSAS QUE TE HACEN MAL” Y “QUERER CAMBIAR LAS COSAS QUE TE ACOMPLEJAN”

Es diferente cuando tu necesidad de cambiar nace del respeto por ti y por crecer como persona, que cuando esa necesidad de cambiar nace de querer quitarte los complejos a base de parches.

Te voy a poner unos ejemplos para que me entiendas mejor:

Ejemplo 1:

Tomas mucho azúcar, la médica (no el médico, ni la médico, “la médica”) te ha dicho que eres diabética y tienes que tomar precauciones. Así que tú, que te quieres y te valoras, reduces drásticamente el consumo de azúcar por el bien de tu salud.

Estás queriendo cambiar las cosas que te hacen mal de una forma muy evidente. Tod@s sabemos que el azúcar es veneno.

Por lo tanto, conseguirás mejorar tu salud, sentirte mejor y tener mayor calidad de vida.

 

Ejemplo 2:

Te acomplejan mucho tus pechos. Son muy pequeños, uno es más grande que el otro y cuando te pones escote pareces una niña de 15 años.

Sé bien cómo te sientes…

Así que te pasas una temporada ahorrando para operarte y ponerte siliciona (o lo que sea que pongan ahora).

Estás queriendo cambiar las cosas que te acomplejan.

Por lo tanto, en lugar de hacer terapia para mejorar tu autoestima, pasas por quirófano y cuando sales, sigues siendo la misma persona acomplejada, pero ahora tienes unas buenas tetas (parche).

 

El ejemplo dos reflejaría claramente lo que es una feminista acomplejada.

Una mujer que a pesar de defender la igualdad, se da tan poco valor a sí misma que piensa que por tener los pechos más grandes será más valiosa y apetecible para los hombres.

¡Cuidado! que no estoy juzgando a las mujeres que se operan los pechos. Cada persona tiene su camino y tiene que encontrar sus soluciones.

Sólo te estoy poniendo un ejemplo que responde a mi experiencia vital de niña acomplejada que pensaba que operándose los pechos su vida mejoraría.

 

 

LA VERDADERA FEMINALISTA

Una verdadera feminalista va mucho más allá:

–         La verdadera feminalista sabe que tiene complejos pero no deja que la limiten.

–         La verdadera feminalista, a veces, llena sus vacíos con cosas externas (comida, tabaco, relaciones sexuales), pero busca soluciones y no se ahoga en la frustración y la auto exigencia en búsqueda de la perfección.

–         La verdadera feminalista lucha por lo que cree, asumiendo que no siempre será el mejor ejemplo porque ella también es un ser humano que se equivoca.

–         La verdadera feminalista intenta ser ella misma el cambio que quiere ver en el mundo, pero sin presión, con amor y paciencia.

–         La verdadera feminalista no busca culpables a lo que le pasa, sabe que la mayor responsabilidad de su vida la tiene ella.

–         La verdadera feminalista puede quejarse, lamentarse y frustrarse lo justo para deshaogarse: luego pasa a la acción.

–         La verdadera feminalista es capaz de respetar a los demás porque se respeta a sí misma por encima de todas las cosas.

–         La verdadera feminalista acepta sus sombras, refuerza sus luces y vive a su manera.

–         La verdadera feminalista lucha por lo que cree, pero siempre es una lucha pacífica.

 

 

CREENCIAS QUE TE IMPULSAN

Seguro que a ti también te ha pasado, que buscas movimientos sociales, ideologías e incluso religiones que tengan algo que ver contigo para sentirte parte de algo más grande que tú.

Has explorado, has leído, has probado, pero nada se adapta a lo que buscas.

Y eso es lo que me ha pasado a mí durante años y por lo que creé mi propio movimiento: El Feminalismo.

Sin embargo, no comparto la idea de que haya que agarrarse a clavos ardiendo para sentirse parte de alguna manada, para ser mejor, para ser más valiosa.

Con el paso de los años yo he ido construyendo mis caminos, porque nadie transita solo uno, y me encantaría que tú hicieses lo mismo.

Por ello te traigo mis herramientas, que pueden servirte o no, pero con las que te podrás inspirar para construir tu propio sendero.

Quizá tu sendero coincide con el mío, en cuyo caso compartiremos lo que tengamos la una para la otra.

Pero en el momento que nuestros caminos se separen, se diferencian o incluso se contrapongan, seremos capaces de mirarnos con amor y seguir respetándonos.

Es indiscutible que cuando encuentras un movimiento o filosofía que encaja contigo, sientes un impulso.

Encontrarlo era justo lo que necesitabas para reafirmarte en tus creencias y seguir hacia delante.

¡Ojalá sea yo ese impulso que necesitas!

Porque con cada impulso se adquieren nuevos aprendizajes que enriquecen el camino del que te hablaba.

Con cada impulso te haces más consciente (no más fuerte, ni mejor, porque ya eres la ostia) para saber qué quieres y qué no quieres en tu vida.

Con cada impulso estás menos acomplejada, eres más libre.

 

 

CONCLUSIONES

Y todo esto para decirte que creas en lo que creas, defiendas lo que defiendas y seas como seas, eres única.

Da igual si te identificas con el feminismo, con el feminalismo, con la Cienciología o con nada en absoluto. Siempre y cuando esas creencias te sirvan para ser más consciente y te hagan más libre.

Si además, las creencias que defiendes sirven para que el mundo cada vez sea un poquito mejor, son las creencias adecuadas.

  • Tienes complejos,
  • tienes vacíos,
  • tienes miedos,
  • puede que seas una feminista muuuuy acomplejada…

Pero eres única, sabes que lo eres y no vas a dejar que esos complejos, vacíos o miedos dirijan tu vida.

Porque tu vida la diriges tú.

Esos miedos pueden quedarse para acompañarte y hacerte de maestros, pero la que dirige tu vida eres tú.

Luchando con amor por lo que crees, aunque al resto del mundo le parezca que estás chalada perdida, conseguirás sentirte tan bien contigo misma que dará igual si tienes tetazas o si te comes un dulcecito de vez en cuando 😉

Por eso yo misma he dejado de ser una feminista acomplejada para luchar de verdad por lo que creo, me he inventado mi propia filosofía y te muestro mis complejos abiertamente.

Que nadie te diga lo que tienes que ser, lo que tienes que creer y qué es lo mejor para ti.

Tú ya sabes qué es lo mejor para ti.

 

Y me encantaría que me lo contases en los comentarios:

¿Te identificas con el feminalismo?

¿Te parece que el feminismo puede ayudar a construir un mundo mejor?

¿Crees que el feminismo te puede aportar lo que necesitas para ser tú misma?

 

Me encanta leerte, no me dejes con las ganas 😉

 

Publicado en: DESARROLLO PERSONAL Etiquetado como: aprender a confiar en ti misma, autoestima, autoestima femenina, feminismo, feminista, luchar por lo que crees, revolucion feminista, ser feminista, superar los complejos, valentía para decir lo que piensas

Barra lateral principal

Copyright © 2023 · Genesis Sample en Genesis Framework · WordPress · Acceder

Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros para recopilar información estadística sobre su navegación y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias, generada a partir de sus pautas de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Acepto Leer Más
Política de cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR